Beneficios de las fresas: pequeñas pero poderosas

Las fresas no solo destacan por su sabor, sino también por su increíble aporte nutricional. Son bajas en calorías y ricas en agua, lo que las convierte en un snack perfecto para mantenernos hidratadas y saciadas sin sumar un exceso de calorías. Pero sus propiedades van mucho más allá:

• Fuente de vitamina C: Una ración de fresas aporta más vitamina C que una naranja, fortaleciendo el sistema inmunológico y combatiendo los radicales libres.
• Aliadas de la piel: Gracias a su alto contenido en antioxidantes, las fresas ayudan a mantener la piel joven, luminosa y protegida frente al envejecimiento prematuro.
• Amigas del corazón: Sus flavonoides y polifenoles contribuyen a reducir la inflamación y a mejorar la salud cardiovascular.
• Reguladoras del tránsito intestinal: Su fibra favorece la digestión y previene el estreñimiento.
• Bajas en azúcar y con índice glucémico bajo: Son aptas para personas con diabetes y una excelente opción para quienes desean controlar sus niveles de azúcar en sangre.

¿Por qué es importante incorporar fresas en la alimentación infantil?

Los niños suelen disfrutar del sabor dulce de las fresas, lo que facilita su incorporación en su dieta sin grandes esfuerzos. Pero más allá del gusto, incluir fresas en la alimentación infantil tiene múltiples beneficios:

• Refuerzo del sistema inmunológico: La vitamina C es clave para prevenir resfriados y fortalecer sus defensas.
• Crecimiento óseo: Contienen calcio, magnesio y fósforo, minerales fundamentales para el desarrollo de los huesos.
• Hidratación natural: Su alto contenido en agua las convierte en una merienda fresca e ideal para los días más cálidos.
• Prevención de la obesidad infantil: Son una alternativa saludable a los dulces procesados, aportando dulzura natural sin azúcares añadidos.

Si los más pequeños aún no las han probado o no muestran interés, se pueden ofrecer en distintas formas para hacerlas más atractivas: en batidos, combinadas con yogur o en brochetas de fruta.

Recetas fáciles y deliciosas con fresas

Aprovechando que estamos en plena temporada, aquí van algunas ideas para disfrutar de las fresas en su mejor versión:

• Batido de fresas y plátano: Licúa un puñado de fresas con un plátano maduro y un vaso de leche o bebida vegetal. Añade un toque de miel si deseas más dulzor.
• Ensalada de fresas, rúcula y queso feta: Una combinación fresca y perfecta para sorprender en cualquier comida. Agrega nueces para un extra de crujiente.
• Fresas con yogur y granola: Un desayuno o merienda equilibrado, nutritivo y delicioso.
• Tarta rápida de fresas: Tritura galletas integrales con un poco de mantequilla para hacer la base, cubre con yogur griego y coloca fresas frescas por encima. ¡Fácil y sin horno!
• Mermelada casera sin azúcar: Cocina las fresas con unas gotas de zumo de limón y un poco de chía para espesar. Perfecta para untar en tostadas o acompañar postres.

Un toque de frescura en tu dieta

Aprovechar la temporada de fresas no solo es una delicia, sino también una oportunidad para mejorar nuestra alimentación con un alimento lleno de beneficios. Ya sean solas, en recetas o como parte de platos más elaborados, las fresas son un imprescindible en cualquier dieta equilibrada. ¿Lista para disfrutar de su sabor y sus propiedades?