Entre las recomendaciones para afrontar mejor el fracaso que aportan los especialistas destacarían: 1-Aceptar lo que sientes Si fracasas es preciso que aceptes y valides tus sentimientos, sin intentar sentirte bien si estás mal, disimular tu sufrimiento o simular que lo has superado. Lo normal es que te sientas afectada y necesites ...
Entre las recomendaciones para afrontar mejor el fracaso que aportan los especialistas destacarían:
1-Aceptar lo que sientes
Si fracasas es preciso que aceptes y valides tus sentimientos, sin intentar sentirte bien si estás mal, disimular tu sufrimiento o simular que lo has superado. Lo normal es que te sientas afectada y necesites un tiempo para procesar el duelo que estás viviendo. Esas emociones, aunque resulten negativas, demuestran tu interés en conseguir el objetivo, algo fundamental para tu desarrollo personal y vital.
No se recomienda recordar los fracasos vividos, aunque pueden ayudarte a analizar tus sentimientos inmediatamente después y lo que has hecho para superarlos. Cuando hayas aceptado que el pasado no se puede cambiar, piensa que puedes enfocarte en construir tu futuro.
2-Entender y aceptar
El fracaso puede ser el resultado de no haberte esforzado lo suficiente o haber tenido mala suerte con algún factor que influye en ese resultado. De manera general, en la mayoría de las ocasiones, no tenemos el control de todos los factores y el fracaso puede ser el resultado de algo imposible de controlar. Es fundamental comprender que las cosas que dependen de ti las has hecho bien para poder aceptar el fracaso.
3-Focalizarte en ti
Es frecuente buscar el reconocimiento de los demás, por lo que intentamos alcanzar el éxito y tenemos miedo al fracaso. Cuando fracasamos, sentimos vergüenza porque focalizamos nuestra atención en lo que van a pensar los demás. La opinión de las personas de tu entorno te afecta, y es normal, pero eres tú quien lo ha intentado y se ha esforzado por conseguir el objetivo, por lo que no tienes que avergonzarte al haber fallado. Cuando temes defraudar a alguien importante para ti, te costará más conseguir lo que te has propuesto. Intenta focalizarte en sentirte satisfecha de ti misma y no en lo que los demás esperan de ti.
4-Fracasar significa avanzar
Cuando te sientes afectada por el fracaso que has vivido, además de sentirte mal, piensa en que lo sucedido te importa porque te has esforzado mucho para conseguir el éxito. No resulta adecuado fijarse únicamente en el resultado final, que es el fracaso, porque el esfuerzo realizado es un proceso de gran valor.
Además, seguro que has aprendido algo que te va a permitir alcanzar ese objetivo u otro con mayor facilidad porque no partirás de cero. Es fácil entenderlo cuando preparas un examen por primera vez (y suspendes) o te preparas para un campeonato deportivo (y no logras el éxito). En ambos casos, todo tu esfuerzo ha servido para aprender y, cuando vuelvas a prepararte, tendrás pasos dados que no necesitarás repetir.
5-Evitar tomarse el fracaso como algo personal
Cualquier fracaso no es parte de tu identidad; es una parte de tu trayectoria vital. Fracasar en un momento determinado no significa ser un fracasado. Es fundamental aprender a diferenciarlo porque ningún fallo te determina ni te define.