Leonardo Da Vinci dedicó desde el 1495 al 1498 a pintar el cuadro de 'La Última Cena'. A diferencia de otras obras, en esta dejó de lado la técnica de la pintura al fresco (aquella en la que se pinta sobre una capa húmeda de mortero de cal) para probar con un ...
Leonardo Da Vinci dedicó desde el 1495 al 1498 a pintar el cuadro de 'La Última Cena'. A diferencia de otras obras, en esta dejó de lado la técnica de la pintura al fresco (aquella en la que se pinta sobre una capa húmeda de mortero de cal) para probar con un método más novedoso, que consistía en combinar el óleo sobre el yeso ya seco, tal y como explican en la página web de la BBC. Esta nueva forma de pintar le permitía al artista una mayor libertad creativa y compositiva, ya que una vez que se aplica la pintura es posible centrarse en los detalles. Pero con el paso del tiempo, la pintura comenzó a resquebrajarse y se realizaron varios trabajos de restauración. Pinin Brambilla, especialista destacada en la restauración de cuadros, dedicó más de dos décadas de su vida a conservar este emblemático fresco de más de cuatro metros de altura. Está situado en el convento de Santa Maria delle Grazie, en Milán. Solo se puede visitar en grupos reducidos y con un tiempo limitado, pudiendo contemplar la obra durante tan solo 15 minutos.
Después de que transcurriesen más de 500 años desde que el pintor le dio vida a este proyecto, en el que se representaba el momento en que Jesús compartió con sus discípulos la confesión de una traición, y a pesar de su deterioro físico y del número de capas de pintura que hubo que retirar para acceder al original, su legado perdura en el tiempo. El Nomad Museo de Madrid nos acerca esta obra para que el visitante la pueda contemplar con lupa distinta en la que interviene la inmersión. De este modo, se recrea un imponente mural a tamaño real para apreciar con lujo de detalle los trazos originales de su creador, así como de las restauraciones que se llevaron a cabo. Con esto se consigue que el visitante no se quede simplemente en lo que se ve con la mirada, sino que "atraviese las capas de pintura" para profundizar "en la maravillosa historia de una obra tan efímera como eterna", según se explica en la web del museo. Se podrá visitar hasta el 13 de abril de lunes a domingo en horario de 10:00 a 22:00 horas. El precio de la entrada general es de 18 euros durante la semana y de 21 euros si se accede en el fin de semana. Además, existen otras modalidades de entrada y packs ahorro.
FOTO PRINCIPAL.: Imagen extraída de la página web de Nomad Museo Inmersivo.