El consumo rápido, desmesurado y sin control alguno se ha ido transformándose con el tiempo hacia un modelo más respetuoso con el entorno, en el que los usuarios eligen las prendas de ropa y los complementos de forma más pausada, más medida y responsable, decidiendo que es mejor prolongar la vida útil de un producto reparándolo en caso de que se estropee o reutilizándolo para crear un nuevo artículo. Ya no es solo cuestión de una moda o de tendencias, sino de no generar tanto residuo textil y solo adquirir lo que se necesita en cada momento. Son muchas las marcas que toman nota de esta práctica sostenible y que ya emplean embalajes de menor impacto medioambiental, que reciclan sus productos o que incorporan materiales más respetuosos con el entorno. 

En el ámbito de la joyería artesanal también se está trabajando en esta dirección para que los usuarios puedan llevar puestas piezas únicas y con creativos diseños, que impacten de manera positiva en el medioambiente. Por ejemplo, en Pizpireta Complementos se elaboran múltiples accesorios, como pendientes, pañuelos, colgantes, pinzas del pelo, sujeta-pañuelos, coleteros, manteles individuales y artículos decorativos para el hogar, entre otros y su creadora Ana Rosa, una diseñadora gráfica e ilustradora zamorana, ha decidido explorar con otras técnicas y buscar la forma de reciclar sus recortes de pendientes para dar vida a nuevos modelos. En su perfil de Instagram se puede observar el proceso de fabricación. De ahí surgen piezas tan interesantes y llamativas como 'Gina reciclado', unos pendientes elaborados a mano a partir de acetato de celulosa reciclado con acabado mate y pulido, o 'Daisi Mini Reciclado', un modelo con forma de flor y tonos verdes y blancos, que se puede lucir como se desee "quitando una pieza o las dos y ponerse solo el aro cuando se desee", tal y como se explica en la descripción del accesorio. En ambos casos, y como bien se apunta en la página web, "el dibujo que hace el patrón del pendiente varía entre las piezas", por lo que no hay una igual a la otra, dando lugar a un complemento diferenciador. 
 

Por su parte, en AURARTE, es otra muestra de como tomar conciencia sobre el entorno que nos rodea y sobre la necesidad de cuidarlo y preservarlo. Esta firma utiliza los recursos naturales presentes en el ambiente (flores silvestres, arena, hojas, etc.) y el material reciclado que se extrae de las costas (cabos, redes, microplásticos, vidrios, etc.) para dar forma a su colección de joyería artesanal elaborada con resina epoxi no tóxica y emplea acero inoxidable hipoalergénico para los enganches. Sus pendientes, anillos, pulseras, collares e imanes se caracterizan por ser "resistentes al agua y a la exposición solar", tal y como informan en su catálogo online. Según explica su creadora en su perfil de Instagram: "en mi taller cada pieza de joyería es más que un adorno, es una cápsula del tiempo que conserva momentos y elementos naturales que de otro modo podrían desvanecerse en la memoria… Cada joya de AURARTE es única, con su propia historia reivindicativa que contar y su propia aura y energía para transmitir". 
 

FOTO PRINCIPAL.: Imagen extraída del perfil de Facebook de Pizpireta Complementos.