En estas fechas es difícil no dejarse llevar por la sucesión de comilonas, los dulces típicos y otras tantas tentaciones, especialmente gastronómicas. Y por qué no, hay que hacerlo y disfrutarlas sin remordimientos. Pero ojo, los excesos, más allá de la temida subida de peso, pueden provocar un pequeño traspiés ...
En estas fechas es difícil no dejarse llevar por la sucesión de comilonas, los dulces típicos y otras tantas tentaciones, especialmente gastronómicas. Y por qué no, hay que hacerlo y disfrutarlas sin remordimientos. Pero ojo, los excesos, más allá de la temida subida de peso, pueden provocar un pequeño traspiés para nuestra dentadura.
Así lo advierte la doctora Irene Esteve, especialista en estética dentofacial. Para prevenir daños, la especialista nos da los tips para saber cuáles son los alimentos y bebidas más dañinos para nuestro esmalte. Toma nota.
Alimentos que pueden dañar el esmalte
"Hay que tener mucho cuidado con el consumo de bebidas carbonatadas con altos niveles de azúcar y ácidos, como por ejemplo, los zumos cítricos, los refrescos, las gaseosas y las bebidas energéticas que no solo contienen altos niveles de azúcar, sino que también son ácidas debido al ácido fosfórico y al ácido carbónico. Esta combinación puede llevar a la erosión del esmalte", señala Esteve.
En este sentido, la odontóloga señala que en estas fechas las elaboraciones de cócteles con jugos de frutas son más que habituales, "por lo que, aunque son naturales, muchos jugos de frutas (como el de naranja o piña) tienen un pH bajo, lo que significa que son ácidos". "Es recomendable consumirlos con moderación y acompañarlos de agua para minimizar su impacto", añade.
La ingesta excesiva de vinagre y productos a base de vinagre es otra de las advertencias de la especialista en estética dentofacial, pues, "aunque tienen propiedades saludables, su acidez puede afectar nuestro esmalte".
Las bebidas calientes, por su parte, también pueden ser un factor de riesgo para nuestro esmalte. "El café y el té, por ejemplo, a menudo tienen un pH ácido y pueden llevar a la decoloración dental. Además, el alto consumo de café, para aguantar los embistes vespertinos, puede llevar a la formación de manchas en los dientes, lo que, a largo plazo, afecta su estética", sostiene.
Otro agente agresor químico es el tabaco, que en estas fechas parece que uno más está más que justificado. "Presta atención, porque puede causar decoloración dental, enfermedad periodontal y aumentar el riesgo de cáncer oral", nos cuenta la experta.
Por último, indica que el alcohol puede resecar la boca y reducir la producción de saliva, "lo que puede aumentar el riesgo de caries y otros problemas dentales". Y por supuesto, "cuidado también con las comidas ricas en azúcares y carbohidratos pueden proporcionar alimentos para las bacterias que producen ácido en la boca, lo que puede llevar a la caries dental".