Con más de medio siglo de historia, esta empresa familiar ha dado vida a productos que son ejemplo de la rica tradición gastronómica de la región. Entre sus joyas, destacan precisamente sus anchoas y la pata de pulpo. La anchoa del Cantábrico es la estrella de Conservas Emilia. Este delicioso pescado, reconocido ...
Con más de medio siglo de historia, esta empresa familiar ha dado vida a productos que son ejemplo de la rica tradición gastronómica de la región. Entre sus joyas, destacan precisamente sus anchoas y la pata de pulpo. La anchoa del Cantábrico es la estrella de Conservas Emilia. Este delicioso pescado, reconocido por su intenso sabor y textura firme, es capturado en las aguas frescas del mar Cantábrico durante los meses primaverales, cuando se encuentra en su mejor momento. La elección del momento de pesca es fundamental, ya que las condiciones del mar influyen en la cantidad de grasa del pescado, lo que potencia su sabor.
El proceso de elaboración de la anchoa es meticuloso y artesanal. Cada ejemplar es limpiado a mano, siguiendo métodos tradicionales que aseguran la máxima calidad del producto final. Este cuidado en la selección y tratamiento del pescado es lo que permite que cada lata de anchoas cuente una historia de dedicación y respeto por la materia prima. Tras la limpieza, las anchoas son sometidas a un proceso de salazón que dura entre seis meses y un año, durante el cual adquieren su característico sabor.
Cuando llega el momento de su envasado, las anchoas son fileteadas cuidadosamente y empacadas a mano en aceite de oliva de alta calidad, que realza aún más su sabor. Este es un producto que no solo promete calidad, sino que también remite al paladar a los sabores del norte de España, haciendo de cada bocado un verdadero deleite.
Pata de pulpo cocida en su propio jugo: un manjar del mar
Otro destacado producto de Conservas Emilia es esta deliciosa pata de pulpo. El pulpo, elegido por su frescura y tamaño adecuados, es cocido de manera meticulosa para mantener su textura tierna y jugosa. Una vez alcanzado el punto de cocción ideal, se envasan en su propio jugo, lo que intensifica su sabor y conserva sus propiedades.
La pata de pulpo es un acompañamiento magnífico para una variedad de platos, desde ensaladas hasta tapas, y se presenta como una opción sofisticada para las comidas navideñas. Este producto que representa la esencia del mar Cantábrico es una elección perfecta para quienes desean impresionar a sus invitados durante las celebraciones.