Puede describirse deterioro cognitivo leve como un proceso neurodegenerativo asociado al envejecimiento que es más intenso de lo que sería esperable en función de la edad del paciente. Actualmente no se conoce un tratamiento o terapia concreta que resulte totalmente eficaz. Existen una serie de medidas que pueden reducir sus implicaciones y facilitar a quien lo sufre y a su entorno una situación más cómoda que les genere una cierta calidad de vida.

Los expertos señalan que, a nivel preventivo, es fundamental llevar una vida saludable para envejecer de manera adecuada tanto física como mentalmente. Sería recomendable:

1-Ayudar a las personas mayores desde la propia familia. El entorno es fundamental para mejorar su vida. Evitar reproches innecesarios y aportarles confianza sin eliminar sus funciones (cocinar y hacer compras, por ejemplo) mientras sean capaces de realizarlas.

2-Aumentar la socialización. Animarles a acudir a centros culturales y viajar con gente de su edad, por ejemplo, resulta imprescindible evitar su aislamiento. Mantener relaciones sociales saludables, leer el periódico, ver la televisión, mirar fotografías antiguas y comentar hechos del pasado, por ejemplo, es fundamental para evitar el aislamiento y la soledad que pueden generar depresiones y la aparición progresiva de demencias.

3-Consumir únicamente los fármacos pautados por el médico. La administración debe ser controlada por los familiares si la persona no está en condiciones de hacerlo. Esta recomendación es importante porque suelen ser personas polimedicadas y cualquier alteración puede provocar alteraciones indeseables en su salud.

4-Eliminar comportamientos tóxicos y hábitos nocivos. El consumo de alcohol y tabaco está totalmente contraindicado.

5-Evitar el sedentarismo y realizar actividad física adaptada a sus condiciones personales. Numerosos especialistas señalan la importancia de realizar ejercicios de coordinación que favorecen la mejora a nivel muscular y mental. Además, tener una buena forma física evitará caídas y traumatismos.

6-Mantener contacto y comunicación. El teléfono funciona a cualquier hora y es un sistema de comunicación perfecta para todos.

7-Practicar gimnasia mental. Puede hacerlo en su propia casa (lectura, crucigramas, sopas de letras, etc.) o en centros terapéuticos especializados en los que los mayores ejercitan su mente para evitar la pérdida de memoria. La realización de ejercicios de estimulación cognitiva ayudará a compensar la pérdida de memoria y facilitará la vida de los mayores y sus familiares.

8-Realizar los controles médicos habituales y adaptados a su edad y circunstancias personales. Es preciso controlar los factores de riesgo, ya que el envejecimiento incrementa la prevalencia de hipertensión, diabetes e hipercolesterolemia, por ejemplo.

9-Seguir una dieta adecuada. Se recomienda la dieta mediterránea por sus efectos antioxidantes que facilitan el funcionamiento correcto del cerebro. Permite incluir en el menú diario frutas, verduras, aceite de oliva y pescados (aportan ácidos omega 3 que favorecen el funcionamiento de las neuronas y reducen los riesgos cardiovasculares).