Botánicamente, la planta calabacera, pertenece a la familia de las cucurbitáceas como el melón y el calabacín, por ejemplo, Existen numerosas variedades de diferentes tamaños y colores (amarillo, naranja, rojo y verde, entre otros). Suelen pesar entre 2 y 8 kg, aunque en algunos casos, pueden pesar más. Poseen una ...
Botánicamente, la planta calabacera, pertenece a la familia de las cucurbitáceas como el melón y el calabacín, por ejemplo, Existen numerosas variedades de diferentes tamaños y colores (amarillo, naranja, rojo y verde, entre otros). Suelen pesar entre 2 y 8 kg, aunque en algunos casos, pueden pesar más. Poseen una cavidad donde se ubican las semillas, la pulpa es dulce y de textura firme y la piel es dura y aislante (se pueden conservar durante meses en un lugar fresco y seco).
Las variedades más conocidas en España son la cidra y la confitera o de cabello de ángel. La mayor parte del cultivo se encuentra en las islas Canarias y Andalucía, aunque también se cultivan en Valencia, Murcia y Cataluña.
A nivel nutricional destacaría la presencia de vitaminas (especialmente betacaroteno o provitamina A, vitaminas del grupo B, C y E), licopeno, ácidos grasos omega 3 y 6, agua, hidratos de carbono y minerales (potasio, calcio, fósforo, magnesio, hierro y cinc). Aporta pocas calorías (26 por cada 100 gramos). La pulpa resulta sana, versátil y sabrosa. Las pepitas concentran el valor nutricional excepcional. Se aconseja en todas las etapas de la vida, especialmente en la infancia.
La calabaza es muy versátil en la cocina y permite elaborar platos nutritivos dulces y salados. Los especialistas señalan que, entre las propiedades de la calabaza destacaría que:
1-Activa el sistema inmunitario. Facilita la expulsión de moco de los pulmones, los bronquios y la garganta, por lo que podría ser útil para mejorar los síntomas y facilitar la curación de resfriados y gripes.
2-Ayuda a mantener el peso. Se considera un alimento saciante que aporta azúcares complejos de asimilación lenta, por lo que resultaría adecuada para mantener el peso en niveles adecuados.
3-Capacidad antioxidante. Reduce la presencia de radicales libres.
4-Cuida el aparato digestivo. Se considera que mejora problemas como gastritis, colon irritable, úlcera gastroduodenal y estreñimiento. La calabaza cocida ayudaría a reducir la inflamación de estómago e intestino.
5-Es diurética. Facilita la expulsión de líquidos retenidos y evita la formación de cálculos renales. Se considera que ayuda a los riñones a cumplir su función limpiadora y desintoxicante.
6-Estimula la función del páncreas. Se cree que facilita la regulación de los niveles de azúcar en sangre, lo que podría considerarse una ayuda para los diabéticos porque sus azúcares se absorben lentamente y no sobrecargan el páncreas.
7-Favorece el buen funcionamiento del sistema cardiovascular. La calabaza, por su riqueza en ácidos grasos poliinsaturados omega-3, regularía la hipertensión y reduciría los niveles de triglicéridos y colesterol LDL en sangre.