Imagina que estás en tu trabajo y, aunque te consideras competente y responsable, sientes que tu jefe está siempre sobre tu hombro, observando cada detalle de lo que haces, corrigiendo cada cosa que haces. Esta situación se denomina micro management, y afecta a la forma en que trabajas, te sientes y te desarrollas profesionalmente.

El micro management se refiere a un estilo de liderazgo en el que el jefe controla cada aspecto del trabajo de sus empleados. Aunque puede parecer que están pendientes del éxito del equipo, la realidad es que este tipo de control extremo puede tener efectos negativos tanto para las personas que lo experimentan como para la organización. Y existen varias razones por las que un jefe puede recurrir al micro management. En muchos casos, tiene que ver con una falta de confianza, ya sea en su equipo o en sí mismos. Sobre todo, porque sienten la necesidad de controlar todos los aspectos del trabajo para asegurarse de que las cosas se hagan correctamente, según sus estándares. Sin embargo, esto suele generar el efecto contrario: los empleados se sienten desmotivados, inseguros de sus capacidades, y menos productivos.

Otra causa común es la inseguridad. Algunos jefes tienen miedo de que sus equipos cometan errores que los puedan hacer quedar mal frente a los clientes o terceras personas. En lugar de fomentar un ambiente donde los errores sean oportunidades de aprendizaje, optan por supervisar cada paso, lo que puede sofocar la creatividad y la autonomía.

Impacto en el equipo

El micro management tiene múltiples consecuencias negativas para las personas que lo sufren. A continuación, vamos a enumerar y analizar algunas de las más comunes:

- Falta de autonomía: Uno de los mayores problemas del micro management es que limita la autonomía de los empleados. Cuando un jefe está constantemente dictando cómo deben hacerse las cosas, los empleados pierden la oportunidad de tomar decisiones por sí mismos. Lo cual afecta a su confianza, a la vez que limita su desarrollo profesional.

- Desmotivación: Sentir que no se confía en tu capacidad para hacer tu trabajo puede ser profundamente desmotivador. Los empleados que experimentan micro management suelen sentirse infravalorados, lo que afecta su compromiso y satisfacción laboral.

- Pérdida de confianza: La confianza es la base de cualquier relación laboral. Si un jefe siente la necesidad de supervisar cada pequeño detalle, el empleado puede percibir que no confían en su capacidad para realizar sus tareas. Esta falta de confianza se vuelve recíproca, deteriorando la relación entre ambos.

- Estrés y ansiedad: Trabajar bajo una supervisión constante puede aumentar significativamente los niveles de estrés y ansiedad. El temor a cometer errores o no cumplir con las expectativas del jefe puede llevar a una mayor presión, afectando la salud mental y el bienestar general.

¿Qué hacer si te enfrentas al micro management?

Si consideras que te encuentras en una situación donde sientes que tu jefe te controla demasiado y estás sufriendo del denominado micro management, existen algunas acciones que puedes llevar a cabo para mejorar la situación:

- Comunícate abiertamente: A veces, los jefes no se dan cuenta de cómo está afectando este control excesivo a sus empleados. Tener una conversación abierta y honesta puede ayudar a establecer límites más claros. Explica cómo te sientes y sugiere formas en las que te gustaría tener más autonomía.

- Demuestra tu capacidad: Asegúrate de ser proactiva y comunicar tus avances antes de que te los pidan. De esta manera, estarás demostrando que tienes el control de tus tareas y que no es necesario supervisarte constantemente. 

- Busca apoyo en tus compañeros/as: Hablar con compañeros/as de trabajo que hayan pasado por la misma situación puede darte una nueva perspectiva o incluso estrategias para manejar mejor el micro management. Además, el apoyo de tus colegas te ayudará a no sentirte sola. 

- Evalúa tu situación: Si, después de intentar mejorar la comunicación y demostrar tu valía, la situación no cambia, puede ser el momento de evaluar si ese entorno es el adecuado para ti. 

Es esencial que los empleados, especialmente las mujeres, se sientan valoradas y empoderadas en su lugar de trabajo. Si estás lidiando con un jefe controlador, recuerda que hay estrategias que puedes emplear para mejorar la situación. Al final del día, un ambiente laboral saludable es aquel donde se fomenta la confianza, la autonomía y el crecimiento profesional.