La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que, aproximadamente, el 40% de la población adulta presenta sobrepeso. No debe considerarse únicamente una cuestión estética, aunque también tiene importancia. Es necesario comprender que el exceso de peso provoca alteraciones en el organismo que pueden afectar a tu salud. Cuando te plantees ...
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que, aproximadamente, el 40% de la población adulta presenta sobrepeso. No debe considerarse únicamente una cuestión estética, aunque también tiene importancia. Es necesario comprender que el exceso de peso provoca alteraciones en el organismo que pueden afectar a tu salud.
Cuando te plantees mantener o reducir tu peso sería recomendable:
1-Consultar a un experto en nutrición en todos los casos pero, especialmente, cuando se presente algún problema de salud específico (como diabetes, hiperlipidemias o problemas renales o tiroideos, entre otros) o te encuentras en una etapa vital concreta (como el embarazo o la lactancia). Es importante tener en cuenta las variaciones hormonales que pueden influir en el aumento de peso y en la planificación de la dieta personalizada.
2-Evitar la elaboración y la ingesta de alimentos que aumentan la cantidad de grasa que se aporta al organismo. Los alimentos fritos, aunque se cocinen en aceite de oliva, deben limitarse y optar por elaboraciones más saludables (como el horno o la plancha, por ejemplo). No se recomienda consumir bebidas con gas, cereales procesados (con alto contenido en azúcar) y embutidos grasos, entre otros.
3-La edad y metabolismo de la persona son dos factores que tienen relación con la eficacia de la dieta. Los jóvenes presentan una velocidad metabólica más alta y realizan una mayor actividad física, lo que facilita el adelgazamiento. A partir de los 40 años el gasto metabólico basal suele reducirse y se recomienda seguir una dieta saludable, rica en proteínas y más baja en calorías y realizar ejercicio físico diario.
4-Modificar hábitos alimentarios inadecuados. La mayoría de los expertos señalan que sería recomendable comer despacio masticando muchas veces cada bocado, realizar varias ingestas de comida sana al día, sin que pase mucho tiempo entre ellas y en cantidad moderada.
5-Practicar ejercicio a diario. El sedentarismo es negativo para la salud y provoca un aumento de peso por acumulación de grasa. Elige el que más te guste y gana la partida a la pereza que te genera hacerlo.
6-Realizar una dieta mediterránea considerada la más adecuada para bajar de peso y mejorar la salud. Entre sus características destacaría que se limitan o excluyen carnes rojas, azúcares y grasas saturadas y se sustituyen alimentos muy calóricos por otros más saludables como vegetales, frutas, aceite de oliva, cereales, marisco y pescado.
7-Seguir una dieta para bajar de peso personalizada porque cada uno tiene características diferentes que van a influir en su seguimiento y eficacia. Es importante respetar la cultura, los horarios, las preferencias gastronómicas, las enfermedades preexistentes y las intolerancias, entre otros factores.