No cabe duda de que las redes sociales forman parte de la vida social de cada vez más personas, sobre todo entre los más jóvenes. Su contenido infinito, la posibilidad de conectar con personas de todo el mundo y conocer qué hace la gente de alrededor son atractivos que hacen ...
No cabe duda de que las redes sociales forman parte de la vida social de cada vez más personas, sobre todo entre los más jóvenes. Su contenido infinito, la posibilidad de conectar con personas de todo el mundo y conocer qué hace la gente de alrededor son atractivos que hacen de las redes sociales un espacio para descubrir.
Sin embargo, aunque algunas aplicaciones cuentan controles de edad, los niños sortean estas limitaciones creándose cuentas a edades cada vez más tempranas, siendo uno de los problemas que preocupa a muchas familias. Según un informe realizado por Qustodio, plataforma líder en seguridad online y bienestar digital para familias, en España, casi uno de cada cuatro niños entre 7 y 9 años tiene TikTok, donde pasan casi una hora y media al día. Así como, uno de cada cinco accede a X (Twitter).
Sumado a esto, España es el país donde, habitualmente, antes se empieza a utilizar Instagram, el 65% de los niños entre 13 y 15 años ya acceden a esta red social, mientras que en países como Estados Unidos o Australia esta aplicación no está entre las más usadas.
Los más jóvenes viven en una era cada vez más digitalizada en la que las redes sociales son una parte integral de su vida, sin embargo, su uso excesivo puede causar problemas de salud mental a los jóvenes, sobre todo a edades tempranas en las que los niños están en periodos de cambio y maduración. Cuidar la salud mental de los más pequeños es fundamental, ya que, según datos proporcionados por Unicef, uno de cada siete adolescentes tiene un problema de salud mental diagnosticado.
Ahora mismo, la sociedad está un momento en el que la seguridad digital de los niños es una prioridad. El Gobierno de España quiere implementar una aplicación para evitar que los menores consuman pornografía en internet, una medida delicada y que suscita ciertas dudas sobre cómo será su aplicación y qué efectos tendrá.
Asimismo, cuidar el contenido al que acceden los niños es, también, una responsabilidad de las familias, quienes tienen que ser conscientes del uso que hacen sus hijos de los dispositivos tecnológicos, así como hablar con ellos abiertamente sobre los peligros que conllevan y del consumo de aplicaciones propias para su edad.
Los expertos de Qustodio recalcan que el uso de temprano de las redes sociales puede exponer a los menores a algunos efectos negativos como:
Emily Lawrenson, Communications Manager de Qustodio, recuerda que "a edades tempranas, las familias deben tener cuidado con el uso que hacen de los dispositivos tecnológicos, ya que todavía no son conscientes de los efectos que pueden tener sobre ellos. Estamos viendo que cada vez acceden más pronto a las redes sociales, lo que les expone a muchos riesgos en edades donde todavía están madurando y no son conscientes de los efectos que pueden tener sobre ellos. Por ello, las familias, el Gobierno y las grandes empresas tecnológicas tienen que hacer un esfuerzo por transmitir una educación digital sana y adecuada para sus hijos".