¿Sabías que todas las personas experimentarán presbicia en un momento u otro de su vida, incluso quienes nunca han tenido problemas de visión? De hecho, ante el envejecimiento generalizado de la población, en la actualidad ya hay 2.100 millones de casos de vista cansada en todo el mundo  y se espera que esta cifra aumente hasta los 4.000 millones para 2.050. En suma, no podemos evitar ni retrasar la aparición de este proceso fisiológico natural asociado al paso del tiempo, pero sí sobrellevarlo mejor. Cómo hacerlo lo explica a Es Vivir Claudia de Escauriaza, óptico optometrista de EssilorLuxottica. 

La especialista indica que los primeros síntomas de la presbicia suelen aparecer entre los 40 y 45 años, y que "no hay factores externos que afecten al desarrollo precoz de la presbicia, ni tampoco personas propensas a desarrollarla antes". "La presbicia es un proceso fisiológico que todos vamos a sufrir y que aparece a medida que nos hacemos mayores", aclara. 

Sí que es verdad, no obstante, "que las personas que suelen realizar tareas que implican un trabajo visual en distancias intermedias y de cerca, como trabajar en ordenador o leer, pueden ser conscientes de los primeros síntomas antes que quienes no suelen realizar este tipo de tareas", asegura De Escauriaza. 

En este sentido, cabe señalar que "actualmente estamos viendo cómo están aumentando el número de présbitas en el mundo". Pero el motivo de este incremento es la mayor esperanza de vida de la población, lo que hace que cada vez haya más ciudadanos con vista cansada. 

Tips para "retrasar" lo máximo posible su aparición 

Lamentablemente, y como afirma la óptico optometrista, no podemos ralentizar su aparición. Ahora bien, existen ejercicios que pueden ayudarnos a tener una visión más confortable. "Utilizar una buena iluminación; aplicar la regla 20/20/20, descansado de la pantalla cada 20 minutos, durante al menos 20 segundos, mirando de lejos a 20 pies (6 metros); y parpadear con frecuencia cuando usemos pantallas para mantener los ojos hidratados", expone la experta. 

Una vez se desarrolla, nos encontramos con varios tratamientos para la presbicia, desde la cirugía, pasando por las lentes de contacto o las lentes oftálmicas como las lentes progresivas. "Éstas últimas son la solución más extendida por su eficacia y por ser una solución no invasiva", comenta. Además, hoy en día, "gracias a los avances tecnológicos hay lentes progresivas en el mercado que aportan una gran calidad visual e incluso permiten una personalización para que las lentes se adapten a la forma de mirar de cada persona, como por ejemplo nuestras lentes Varilux XR Series", añade. 

Para concluir, Claudia de Escauriaza lanza un mensaje de vital importancia. "Para poder tener una buena salud visual, es fundamental acudir a revisiones periódicas de nuestra visión cada año, con nuestro profesional de la salud visual de confianza, quien podrá detectar si hemos tenido algún cambio en nuestra visión y ofrecernos una solución para tratarlo, cuanto antes", finaliza.