Durante la temporada de más calor, nuestra agenda se llena de planes al aire libre: participamos en rutas de senderismo, nos apuntamos a cursos de surf, viajamos, vamos de festivales a escuchar a nuestros grupos favoritos, acudimos a la playa, al campo o la montaña para oxigenarnos y liberar el estrés, y organizamos barbacoas, entre otras muchas actividades. Pero tampoco podemos confiarnos y comer solo un sándwich rápido o unas frutas para saciar el hambre. Es verdad que durante el verano nos apetecen otros alimentos más ligeros, que sirvan para hidratarnos, pero que no nos caigan muy pesados en el estómago. Sin embargo, esto no quiere decir que tengamos que comer lo justo, ya que para las actividades que tenemos previstas se requiere cuidar de la alimentación y mantener los niveles de energía al alza.

Llévate contigo un termo con agua para beber, aunque no tengas ganas para no caer en la deshidratación. Las infusiones y las frutas que contengan agua son bien recibidas. Estas últimas te saciarán, te aportarán fibra y vitaminas. Prepara un táper con trocitos de piña, melón, sandía, melocotones, plátanos, naranjas, fresas o albaricoques. Hazte una ensalada variada con tomate, lechuga, zanahoria, pepino, maíz, espárragos, aguacate y complétala con lentejas, garbanzos, arroz o pasta o si lo prefieres hazte un gazpacho, un salmorejo o una vichyssoise (crema de puerros que se sirve fría). Las anchoas, las aceitunas, las tortitas de maíz, el jamón serrano, los quesos curados, las sardinas, los frutos secos salados están recomendados para subir la tensión gracias a su contenido de sodio. El café al estar compuesto por cafeína cumple igualmente esta función. La ensaladilla y el salpicón son dos de los clásicos, pero para evitar las temidas intoxicaciones alimentarias guarda ambos platos en recipientes herméticos y mantenlos a una temperatura fría hasta el momento de consumirlos. No eches huevo ni tampoco prepares mayonesa por si las moscas. En el caso de que te apetezca mucho, opta por huevo pasteurizado, que ya se comercializa así y es el que suelen usar en restaurantes o pastelerías para la elaboración de sus productos. Por otra parte, sería aconsejable que añadieses el vinagre a tu salpicón cuando lo vayas a servir en vez de traerlo aliñado ya de casa. Deja a un lado los productos ultraprocesados o azucarados, sustitúyelos por boles de yogur con frutas y cereales, así mantendrás tu tránsito intestinal a raya. Los frutos secos, como cacahuetes, almendras, pistachos y nueces, entre otras variedades, pueden ser un snack saludable para recuperar energía, al igual que los bocadillos preparados con pan de semillas y chocolate negro. Incorpora el salmón, la quinoa, los filetes de pollo o pavo, y las espinacas a la lista y combínalos como quieras para confeccionar menús saludables y equilibrados al gusto.

FOTO PRINCIPAL.: Foto de Luna  Lovegood.