El canon de belleza corporal femeninos se representa tradicionalmente por las medidas 90-60-90. Es lo que también se conoce popularmente como "cuerpo de guitarra" o "reloj de arena". Este ideal se popularizó en los años 60 con Marilyn Monroe y, más recientemente, ha sido actualizado "proporcionalmente" por las famosas "Kardashians". ...
El canon de belleza corporal femeninos se representa tradicionalmente por las medidas 90-60-90. Es lo que también se conoce popularmente como "cuerpo de guitarra" o "reloj de arena". Este ideal se popularizó en los años 60 con Marilyn Monroe y, más recientemente, ha sido actualizado "proporcionalmente" por las famosas "Kardashians". Se caracteriza por una cintura definida, pecho, caderas y glúteos prominentes, creando una figura sensual. ¿Cómo lograr esta silueta si la genética no te la ha proporcionado? El experto en Lipoescultura Dr. Ángel Martín lo consigue combinando la tecnología Vaser® y Lipotransferencia
¿En qué consiste?
La tecnología Vaser® permite extraer la grasa sin destruirla, sin traumatismos, mejorando la adherencia y retracción de la piel para lograr un vientre plano y una cintura definida. Con la Lipotransferencia es posible transferir el tejido graso en el mismo acto quirúrgico a los glúteos, logrando volumen, definición y caderas más prominentes.
¿Necesita hospitalización?
No, porque es una intervención de carácter ambulatorio, por lo que en unas horas la paciente está de vuelta en casa. En los días previos, se deberán seguir estrictamente las recomendaciones del cirujano, incluyendo un régimen específico de alimentación e hidratación, para optimizar los resultados.
¿Cómo se lleva a cabo la intervención?
Con anestesia local y sedación. Inicialmente, se extrae la grasa mediante la técnica LipoVáser, que consiste en infiltrar una solución tumescente y utilizar una cánula de ultrasonidos para romper las células grasas sin dañar vasos sanguíneos ni nervios, lo que reduce significativamente los hematomas y las molestias en el posoperatorio. Posteriormente, se extrae la grasa mediante suaves movimientos con una cánula de extracción, succionándola en lugar de destruirla, para, una vez tratada, reutilizar en otra parte del cuerpo.
¿Cuáles son los beneficios del procedimiento?
Con los ultrasonidos se logra un calentamiento controlado que promueve la generación de nuevo colágeno y mejora la retracción de la piel, evitando la flacidez. Este sistema permite diluir las tres capas de grasa (superficial, media y profunda) en áreas con musculatura, lo que permite que la piel se adhiera a la fascia del músculo logrando una alta definición, especialmente en el área abdominal.
Una vez extraída la grasa, se purifica mediante centrifugación y se transfiere a los glúteos mediante inyecciones simples en los músculos, lo que proporciona volumen y un efecto lifting en la zona glútea. La grasa autóloga se asienta de forma permanente, mejorando la calidad de la piel y los tejidos gracias a las células madre presentes en el tejido graso.
¿Cuáles son las ventajas y resultados?
Las ventajas de la lipotransferencia es que no se realizan incisiones, no hay riesgo de rechazo al utilizar la propia grasa del paciente, y en una sola intervención se puede conseguir la figura deseada. Tras la cirugía, es necesario usar una faja compresiva durante un mes. Los resultados mejoran semana tras semana, y se aprecian completamente a los seis meses.
¿Qué recomendaciones daría a una persona que quiere optar por este tratamiento?
Poner su salud en manos de un cirujano cualificado y experimentado en esta técnica, eligiendo una clínica que te ofrezca todas las garantías de seguridad. En la primera cita, el cirujano realizará una evaluación general que incluye identificar y valorar los depósitos de grasa existentes, así como el tono y la firmeza de la piel. Además, llevará a cabo una historia clínica completa y explicará detalladamente cada paso del procedimiento. Por parte del paciente es fundamental expresar las expectativas respecto a los resultados y plantear todas las dudas sobre la cirugía, tanto las iniciales como las que puedan surgir tras la explicación. Una buena comunicación y empatía entre el especialista y el paciente son esenciales para el éxito del tratamiento.