Se puede definir autoeficacia como la confianza que tenemos en nuestras propias capacidades para poner en práctica determinadas acciones y lograr un objetivo. Es fundamental desarrollar la autoeficacia durante la infancia porque influye en nuestro desarrollo y capacidad de logro en la edad adulta. Los expertos señalan que es posible mejorar ...
Se puede definir autoeficacia como la confianza que tenemos en nuestras propias capacidades para poner en práctica determinadas acciones y lograr un objetivo. Es fundamental desarrollar la autoeficacia durante la infancia porque influye en nuestro desarrollo y capacidad de logro en la edad adulta.
Los expertos señalan que es posible mejorar la autoeficacia de distintas formas siguiendo unas sencillas recomendaciones entre las que destacarían:
1-Afronta los desafíos. Enfrentarte de manera intencionada a tareas difíciles te ayuda a demostrarte y convencerte de que puedes lograr más cosas de las que crees.
2-Aprende y practica. Si deseas aumentar tu competencia en algún ámbito, aprende y trabaja en él. Empieza reconociendo lo que no sabes y céntrate en la apertura al cambio para poder implementar nuevas perspectivas.
3-Céntrate en pequeños objetivos a corto plazo que no sean muy difíciles de cumplir y formen parte de objetivos más grandes y a largo plazo. Crear un plan de acción con lo que necesitas y lo que ya tienes para lograrlo te permitirá ver tu progreso y capacidad para conseguirlo.
4-Equivocarte también es un aprendizaje que, además, te fortalece. Todos cometemos errores pero no podemos permitir que nos paralicen. Desarrollar la autoeficacia es un proceso en constante evolución en el que la persona debe ver cómo logra pequeños avances y victorias junto a retrocesos y errores que también deben ser integrados para resolverlos y aumentar nuestra sensación de competencia.
5-Felicítate siempre por lo que vas consiguiendo. No subestimes lo que consigues porque cualquier logro, por pequeños que parezca, es preciso reconocerlo y celebrarlo.
6-Evita la comparación con los demás. Es frecuente que nuestra propia autoeficacia se vea reducida cuando vemos que otras personas consiguen cosas que a nosotros nos resultan difíciles. Cada uno tiene sus propias habilidades y sus propias experiencias. El modelado social (aprender al observar e imitar a expertos), es adecuado, pero sin compararte con ellos.
7-Escapa de las personas que te critican y minimizan todo lo que haces. Su compañía te bloquea y reduce tu autoeficacia. Únete a quienes te valoran y animan a conseguir tus objetivos.
8-Recordar las situaciones en las que hemos tenido éxito al poner en práctica determinadas acciones para poder aplicarlas y sentirnos fortalecidos y eficaces.
9-Manejar las emociones y controlar los pensamientos. El miedo al fracaso o pensar en que vas a decepcionar a otros generan inseguridad y reducen tus expectativas de éxito. La autoeficacia precisa la conjunción entre las competencias personales y el equilibrio emocional.
10-Acepta el feedback positivo y negativo. Es importante aceptar nuestros errores y permitir la ayuda de quien sabe más aceptando los refuerzos positivos (porque los elogios nos impulsan y fortalecen).