Con la subida de las temperaturas, todos buscamos alimentos frescos que nos ayuden a mitigar la sensación de calor. En esa búsqueda, solemos recurrir a ensaladas o frutas acuosas como la sandía o el melón. Sin embargo, en el verano también queremos disfrutar de antojos dulces que no resulten pesados ...
Con la subida de las temperaturas, todos buscamos alimentos frescos que nos ayuden a mitigar la sensación de calor. En esa búsqueda, solemos recurrir a ensaladas o frutas acuosas como la sandía o el melón. Sin embargo, en el verano también queremos disfrutar de antojos dulces que no resulten pesados y que, además, nos aporten ese frescor para enfrentar el calor.
Aunque el clásico helado de chocolate y los granizados de fresa o limón son opciones muy populares, existen alternativas igualmente sabrosas y refrescantes. En ese sentido, los expertos de Caro Import, la compañía española especializada en la fabricación, importación y distribución de alimentos argentinos, comparten cinco ideas para refrescarnos este verano sin dejar a un lado esa dulzura tan necesaria.
El calor es sinónimo de helados, y qué mejor forma de disfrutarlos que con nuestros ingredientes favoritos. Si bien en los supermercados hay muchas alternativas –chocolate, vainilla, limón, menta, etc.–, también es posible hacer helado casero de casi cualquier ingrediente. Para los amantes del dulce de leche, se puede hacer un helado sin necesidad de máquinas mezclando leche entera, crema de leche y el ingrediente estrella: dulce de leche Márdel (que no sea pastelero). Se mezclan y se baten todos los ingredientes y se guarda en el congelador durante unas tres horas. Luego, se vuelve a batir bien se deja reposar y se repite la operación una tercera vez. Al cabo de unas horas el helado casero de dulce de leche estará listo para hacer más llevaderas las tardes calurosas del verano.
Esta receta es ideal como desayuno, merienda o postre. En un vaso alto, alterna capas de yogur griego, Dulce de Leche Márdel, granola y frutas frescas como fresas, arándanos o plátano. Repite hasta llenar el vaso y sirve frío para disfrutar de esta delicia refrescante.
Mezcla en una licuadora 2 plátanos maduros, 1 taza de leche, 3 cucharadas de dulce de leche Márdel y hielo. Licúa la mezcla hasta que esté suave y homogénea. En menos de 5 minutos tendrás una merienda perfecta para los días de calor en los que quieres agregar un toque dulce.
Para los amantes de los postres, esta crema fresquita es ideal. Primero, calienta la mezcla del puré del mango con azúcar y huevo. Tras retirarla del fuego, añade gelatina y mantequilla para aportar textura. Bate la mezcla y repártela en vasitos para dejarla enfriar. Una vez fría, prepara la crema de dulce de leche integrando Dulce de Leche Pastelero de Márdel con nata semi montada y vierte el resultado sobre de la crema de mango ya fría. Decora con trocitos de mango y un chorrito de dulce de leche.
Una manera divertida y rápida para disfrutar fruta con un toque dulce es cortar tus frutas favoritas en trocitos pequeños, ensartarlas en palito de brocheta y agregar el toque final bañándolas con Dulce de Leche Márdel. ¡Te encantará!
"Mezclar cualquier tipo de fruta con dulce de leche es una apuesta segura gracias a su frescura y el contraste de texturas. Además, es una tradición muy extendida en Latinoamérica debido a su versatilidad, el sabor único y a la cantidad de nutrientes que lo convierten en un postre muy completo", concluye Diego Maccari, CEO de Caro Import.