¿Fruta o verdura?

Seguramente te hayas sorprendido al leer la palabra fruta, pero sí, el tomate es una fruta, desde una clasificación botánica, ya que, según sus características fisiológicas (estructura, función y organización), el tomate es una fruta porque contiene pequeñas semillas en medio y crece de la flor de la planta de tomate. Históricamente, el tomate era considerado como una hortaliza, porque se trataba de una planta comestible cultivada en un huerto y, seamos realistas, nos cuesta concebirlo como fruta porque solemos consumirlo en ensalada, como base para salsas o como parte de una comida principal pero no para merendar o desayunar. 

De dónde viene el tomate

El tomate llegó a Europa en el siglo XVI de la mano de Cristóbal Colón que lo trajo de América. También hay historiadores que afirman que llegó más tarde de la mano de Hernán Cortés. El origen del tomate se encuentra en los Bajos Andes y sus primeros cultivadores fueron los aztecas. 

El tomate (Solanum lycopersicum) es el fruto de la tomatera, suele tener forma esférica y su color dependerá de la pulpa que tenga. 

Beneficios nutricionales del tomate

Además, de su exquisito sabor, el tomate nos aporta una gran cantidad de beneficios nutricionales que lo convierten en imprescindible para una dieta saludable y equilibrada. El tomate contiene potasio, fósforo, magnesio, cobre; una gran cantidad de proteínas vegetales; además de vitaminas A, C, K y ácido fólico. Por todo ello nos ayuda a:

• Disfrutar de un corazón sano y fuerte, regulando la tensión arterial y ayudando a reducir los triglicéridos en la sangre.
• Reduce los efectos del humo del trabajo, ya que combate eficazmente la aparición de las nitrosaminas (uno de los agentes más nocivos del tabaco). 
• Ayudan a que tengamos una piel más sana y más elástica.
• Mejora la vista, gracias a su alto contenido en Vitamina A. Al ser un antioxidante, evita la degeneración macular. 
• Beneficia la salud digestiva, ya que, al ser un gran antioxidante, hace que se conviertan en un alimento depurativo y desintoxicante. 
• Evita las infecciones urinarias, gracias a que contiene ácido úrico que ayuda a desintoxicar el organismo. 

Tipos de tomates

Existen diferentes tipos de tomates que comparten características y beneficios, pero tienen un aspecto distinto. 

Tomate verde: El tomate verde suele ser más pequeño que el rojo. Se le considera el primer tomate descubierto por los aztecas. 

Tomate rosa: Los tomates rosas tienen un sabor intenso y dulzón. Suelen ser de gran tamaño y es especialmente aromático y carnoso, con la piel muy fina. 

Tomate negro: También conocido como Kumato, este tomate tiene un color verde oscuro y es ideal para ensaladas y mermeladas. 

Tomate cherry: Se cree que el tomate cherry es originario de Chile y Perú y que se cultiva desde el siglo XIX. Se diferencia del resto de tomates por su dulzura y porque contienen mucha agua. 

Tomate azul: Es uno de los tomates más pequeños que se han encontrado hasta ahora y no solo se diferencia del resto por su color, sino también por su sabor. Es ideal para hacer mermeladas, salsas y guisos.