Por ello, hemos recurrido a los expertos de Germaine Goya, el centro de belleza más TOP del barrio de Salamanca, para que nos cuenten sus trucos para que nuestra piel reciba el dorado del sol o del autobronceador y el resultado sea espectacular. 1. EXFOLIAR, EL PASO IMPRESCINDIBLE. Limpiar la piel y exfoliarla ...
Por ello, hemos recurrido a los expertos de Germaine Goya, el centro de belleza más TOP del barrio de Salamanca, para que nos cuenten sus trucos para que nuestra piel reciba el dorado del sol o del autobronceador y el resultado sea espectacular.
1. EXFOLIAR, EL PASO IMPRESCINDIBLE.
Limpiar la piel y exfoliarla es el primer paso para mejorar su calidad. Con ello se eliminan células muertas, impurezas y rugosidades de la piel y se deja lista para recibir todos los tratamientos posteriores.
2. CONTINUAR UTILIZANDO PROTECTOR SOLAR.
La piel necesita estar protegida de los rayos ultravioletas del sol todo el año. Además, si se utilizan cremas con retinol es importante combinarlas con un protector solar alto para evitar quemaduras solares.
3. HIDRATAR, DÍA Y NOCHE.
Para lucir una piel radiante, hay que hidratarla en profundidad. Algo que nos ayudará, también, a prolongar el bronceado. Si aparecen manchas es recomendable acudir a un facialista.
4. HÁBITOS SALUDABLES
La dieta deberá ser rica en antioxidantes, como frutas y verduras frescas. Los antioxidantes, como los betacarotenos y las vitaminas C y E, pueden ayudar a proteger tu piel contra el daño de los radicales libres producido por la exposición al sol.
5. DEPILATE
Si necesitas depilarte, para un acabado perfecto, hazlo al menos 24 horas antes de aplicar el autobronceador o tomar el sol, para evitar irritaciones y asegurar que los poros estén cerrados.
6. LIMPIAR
Asegúrate de que tu piel esté libre de maquillaje, desodorante, perfume o cualquier otro producto antes de aplicar el autobronceador o tomar el sol. Estos productos pueden crear una barrera que impide la absorción uniforme del autobronceador.
7. PERFUMES Y QUÍMICOS
Evita el uso de perfumes o cosméticos que puedan sensibilizar tu piel. Algunos productos pueden hacer que tu piel sea más susceptible a quemaduras solares e irritaciones cosméticas.