¿Qué es el Ashtanga Yoga?

El Ashtanga Yoga es una forma dinámica y vigorosa de yoga que combina la respiración consciente (pranayama) con una serie de posturas (asanas) fluidas y conectadas. Esta práctica, que tiene sus raíces en la antigua tradición del yoga, fue popularizada por el maestro Sri K. Pattabhi Jois en el siglo XX.

Se practica siguiendo una secuencia de posturas divididas en series progresivas: la Serie Primaria (Yoga Chikitsa), la Serie Intermedia (Nadi Shodhana) y las Series Avanzadas (Sthira Bhaga). Cada una de estas series se compone de una serie fija de posturas que se realiza en secuencia, coordinando el movimiento con la respiración en un flujo continuo. 

Claves del Ashtanga Yoga

• Vinyasa: El aspecto central del Ashtanga Yoga es el vinyasa, que se refiere a la sincronización de la respiración con el movimiento. Cada postura se realiza en un vinyasa específico, que consiste en una secuencia de movimientos fluidos y coordinados.
• Ujjayi Pranayama: Esta técnica de respiración se utiliza en el Ashtanga Yoga para mantener el flujo de energía durante la práctica. Se realiza inhalando y exhalando a través de la nariz mientras se contraen ligeramente la garganta y la glotis, lo que produce un sonido suave y constante similar al del mar.
• Bandhas: Los bandhas son cierres energéticos que se aplican durante la práctica del Ashtanga Yoga para canalizar y controlar el flujo de energía. Los tres principales bandhas son Mula Bandha (cierre raíz), Uddiyana Bandha (cierre abdominal) y Jalandhara Bandha (cierre de la garganta).

Beneficios de practicar el Ashtanga Yoga

Esta modalidad de yoga proporciona innumerables beneficios tanta para nuestra salud mental y física. Algunos de estos beneficios son: 

1. Ayuda a fortalecer los músculos: El Ashtanga Yoga es muy exigente y requiere de mucho esfuerzo físico, ayudando a fortalecer los músculos, la flexibilidad, y a aumentar la resistencia cardiovascular. 
2. Calma la mente: Sincronizar la respiración con el movimiento continuo ayuda a calmar la mente y reducir el estrés, ayudando a relajarnos y a conseguir una mayor claridad mental. 
3. Estimula el crecimiento espiritual: Con la práctica constante del Ashtanga Yoga se puede cultivar una mayor conciencia corporal y espiritual, así como una conexión más profunda con una misma y con nuestro entorno. 
4. Mejora la postura y el equilibrio corporal: Muchas de las posturas del Ashtanga Yoga incluyen estiramientos de los músculos que soportan la columna vertebral, ayudando a mejorar la postura corporal. Cuando los músculos se fortalecen, se alinean correctamente. 
5. Aumenta la energía y vitalidad: Con la práctica del Ashtanga Yoga se experimenta un aumento de la energía y la vitalidad, debido a liberación de endorfinas, las hormonas responsables de mejorar el estado de ánimo y la sensación de bienestar.