¡Cambiamos de temporada! La primavera ha llegado calurosa y la floración está en uno de sus puntos más álgidos. Así que, si eres un súper amante de las plantas y deseas que tengan el mismo aspecto saludable y estén como el primer día, te recomendamos, gracias a algunos y buens ...
¡Cambiamos de temporada! La primavera ha llegado calurosa y la floración está en uno de sus puntos más álgidos. Así que, si eres un súper amante de las plantas y deseas que tengan el mismo aspecto saludable y estén como el primer día, te recomendamos, gracias a algunos y buens consejos de los profesionales de Interflora, cómo cuidar tus amadas plantas de interior.
¿Cómo mantener saludables en este momento de transición, y han seleccionado una serie de plantas de interior perfectas, incluso, para los más novatos?
Luminosidad: La luz es esencial para las plantas de interior ya que alimenta el proceso de fotosíntesis. La cantidad de luz requerida varía según el tipo de planta. Por ejemplo, las begonias necesitan luz intensa y son ideales para colocar en un alféizar luminoso. El ficus, en cambio, no requiere luz directa pero necesita una iluminación adecuada; la falta de luz puede causar la caída de las hojas.
Para espacios con poca luz, el uso de luces LED artificiales puede ser una solución efectiva para complementar la luz natural y promover el crecimiento de las plantas de interior.
Temperatura: Es importante mantener las plantas alejadas de fuentes directas de calor y corrientes de aire frío para garantizar un ambiente estable y confortable. Algunas plantas pueden requerir un nivel de humedad más alto, en cuyo caso se puede considerar el uso de un humidificador o colocar las macetas en una bandeja llena de agua y piedras para aumentar la humedad alrededor de las plantas. Por otro lado, si se observan mosquitos en las plantas, es probable que sea causado por un exceso de humedad.
Para eliminar los mosquitos, es recomendable suspender el riego hasta que el suelo se seque hasta una profundidad de aproximadamente 5 cm para matar las larvas.
Riego: El riego de las plantas es crucial para su supervivencia y salud. Aunque existen trucos para saber cuándo una planta necesita agua y hay principios generales que se pueden seguir, no se debe olvidar que cada planta puede requerir un cuidado específico. Por ejemplo, las plantas suculentas pueden sobrevivir varias semanas sin ser regadas, ya que están acostumbradas a condiciones de sequía extrema y de hecho tienen reservas de agua en sus hojas, tronco y raíces que utilizan cuando es necesario.
En cualquier caso, se recomienda regar las plantas temprano por la mañana y usar agua del tiempo porque es más fácil de absorber.
Trasplante: Una de las actividades que generalmente se realizan en primavera y que es extremadamente útil para la salud de las plantas es el trasplante. Para trasplantar fácilmente una planta de interior, se recomienda no regar durante algunos días para obtener un terrón de tierra seca. Los pasos para trasplantar son sencillos: tomar una maceta nueva y limpia y sumergirla en agua durante una hora. Verter unos centímetros de tierra en el fondo de la maceta.
Tomar la planta a transplantar desde la base, boca abajo y colocarla verticalmente en la nueva maceta. Finalmente, llenar la maceta con tierra hasta dos centímetros del borde.
Poda: Algunas plantas pueden requerir poda por razones estéticas, como mantener una forma armoniosa o una floración más densa y regular, además de mejorar su robustez. Se recomienda realizar la poda al principio de la primavera, especialmente para plantas trepadoras o colgantes como las buganvillas o el hibisco, utilizando tijeras de podar o a mano.
Sin embargo, plantas como el ficus, las palmeras de interior, los cactus, las suculentas y las orquídeas a menudo no necesitan poda. En caso de que sea necesario intervenir, es recomendable hacerlo con cuidado, limitándose a tratar las partes dañadas.
Limpieza de las hojas: Es fundamental eliminar regularmente el polvo de las hojas de las plantas utilizando un paño húmedo. El polvo, al acumularse en las hojas, puede obstruir los poros y comprometer el intercambio adecuado de gases durante la fotosíntesis, reduciendo la eficiencia de la planta para absorber la luz solar y producir energía.
Además, el polvo puede favorecer el desarrollo de parásitos y enfermedades fúngicas que pueden dañar la planta a largo plazo.Una selección de plantas de interior:
Aloe: En maceta en casa o en el jardín durante el verano, el aloe vera es una planta perfecta para cada rincón. Con sus hojas largas y carnosas, es fácil entender cuánta agua necesita. ¡Cuando las hojas estén planas, es hora de regar el aloe vera!
Sansevieria: Esta planta erecta de hojas anchas es apreciada por su diseño original. Es una de las plantas de interior más fáciles de cuidar, ya que no necesita muchos riegos y próspera tanto al sol como en la sombra.
Drácena: Esta planta es apreciada por su magnífico follaje lanceolado y arqueado. La drácena solo debe regarse cuando la superficie del suelo esté seca. En primavera y verano, regar cuando el suelo esté seco hasta 2 cm de profundidad. En invierno, regar solo cada dos semanas. Ya sea en la oficina, en el apartamento o en casa, la dracena se conforma con una posición luminosa o semi sombreada.
Kentia: La kentia prospera en condiciones de luz o semi sombra. Fertilizar cada 15 días en primavera y verano. Los riegos son un poco más frecuentes en la temporada cálida, pero en invierno se pueden reducir a un riego cada 10 días aproximadamente.
Monstera: Esta liana tropical de follaje cortado es una planta trepadora. Prospera en cualquier habitación y no necesita muchos riegos. Como la monstera es trepadora, hay que proporcionarle un soporte como un enrejado o un poste de fibra de coco.
Ficus: Este arbusto de crecimiento lento tomará un poco de tiempo para alcanzar su altura completa. El ficus necesita riegos moderados. Asegúrate de que el suelo se seque unos centímetros entre dos riegos. En primavera y verano, añadir fertilizante líquido al agua cada dos semanas.