La quinoa a diferencia del arroz, la avena o el centeno, no es un cereal, sino que es una diminuta semilla que se extrae de planta de los Andes. Es estrecha y alargada, y sus flores lucen un color diferente en función de la variedad cosechada. Posteriormente, se recolectan las hojas, que pasan por un proceso de secado y se tamizan para extraer la cáscara, quedándose únicamente con las semillas, después se secan y se envasan. Es un ingrediente idóneo para los celíacos, ya que no contiene gluten, así como para las personas que tienen problemas a la hora de regular el tránsito intestinal porque contiene fibra, es rica en proteínas, en vitaminas y en minerales. También es antioxidante, por lo que contrarresta los signos visibles del envejecimiento.

En la cocina tiene múltiples usos porque tanto puede ser utilizada para acompañar carne o pescado, como para ser sustituida por el arroz, la pasta o la lechuga cuando se prepara una ensalada. Pero no solo va bien con las recetas saladas, sino que combina con las dulces y tampoco es un comestible que se tenga que reservar para la comida o la cena, es adecuado para con los desayunos o meriendas. Antes cocinarla, debes lavarla bien para retirar las saponinas, unos compuestos que se encuentran en la parte externa de la semilla y que le confieren ese amargor, así como cualquier impureza que pueda tener. Métela en un cuenco y cúbrela de agua, mueve los granos con las manos para que se enjuaguen bien, cuélala y repite el proceso varias veces hasta que veas que el agua está limpia y transparente. Después, escúrrela, métela dentro de un cazo, añade el agua necesaria, deja que hierva y tendrá que estar cociéndose unos 15 minutos. Una vez que transcurra el tiempo pertinente, remuévela y cuélala de nuevo.

Una vez conocido un poco más acerca de la quinoa y sus beneficios, es hora de ponerse manos a la obra y sacarle partido de cuatro formas posibles. Desde el canal de Simple Blending, Mónica Acha, dietista, nutricionista y tecnóloga de los alimentos, enseña cómo preparar una nutritiva sopa de quinoa y mejillones.

Sopa de quinoa con mejillones

Ingredientes

• 1 kg de mejillones.
• 1 diente de ajo.
• 1 cebolla.
• 1 puerro.
• 1 taza de quinoa.
• 2 litros de agua.
• 60 ml de vino blanco.
• 2 cucharadas de salsa de tomate.
• 2 cucharadas de aceite de oliva.
• Perejil.
• Pimienta negra.

Elaboración:

Comienza lavando y limpiando bien los mejillones. Tras este paso deposítalos dentro de una cacerola al fuego, tápalos y déjalos unos minutos hasta que se abran. A continuación, retira los mejillones para un cuenco y cuela el caldo. Coge otro recipiente de cocción, echa aceite y sofríe el ajo picado, la cebolla y el puerro troceados. Luego añade la salsa de tomate, remueve y agrega un chorrito de vino blanco. Cuando se evapore el alcohol, vierte el caldo de los mejillones y el agua. Después, incorpora la quinoa, remueve, echa una pizca de pimienta negra molida y deja que hierva, pero con la cacerola tapada. Finalmente, retira las cáscaras de los mejillones, añade los mejillones a la sopa y unas hojitas picadas de perejil.

Con esta semilla y unos cuentas ingredientes más podrás hacer tu propio pan casero, así lo tendrás a mano en tu día a día para hacerte un bocadillo, una tosta o como acompañamiento de tus comidas o cenas. Esta receta viene de la mano de Las Maria Cocinillas.

Pan de quinoa

Ingredientes

• 350 g de quinoa.
• 600 ml de agua.
• 60 g de lino.
• 180 ml de agua.
• 125 ml de agua.
• 60 g de aceite de oliva.
• Pimienta al gusto.
• 1 cucharada de zumo de limón.
• 2 cucharadas de cúrcuma seca.
• Romero fresco.
• Bicarbonato sódico.
• Sal.

Elaboración:

Lava bien la quinoa bajo el grifo, pásala para un bol, cúbrela de agua, remuévela y déjala reposar unos 25 minutos. Coge el vaso de la batidora e introduce en él las semillas de lino y el agua y tritura todo. Seguidamente, escurre la quinoa y añádela al vaso anterior junto con un poco más de agua, así como un chorrito de aceite de oliva, la cúrcuma, la sal, el bicarbonato sódico, pimienta, el zumo de limón y el romero fresco. Bate todo bien, remueve y coloca la mezcla sobre un molde previamente forrado con papel de hornear. Precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo, decora la masa con romero y pipas de girasol e introdúcela en su interior, dejando que cueca entre una hora y una hora y media. Ponlo a enfriar sobre una rejilla.

Una ventaja de la quinoa, al igual que el arroz o la pasta, es que la puedes llevar dentro de un táper para comer en el trabajo o dejarla listo el día antes y comerla al día siguiente. En el videotutorial de Antojitos de Arnie proponen un acompañamiento multicolor para el pescado, el cual podrás sustituir por otra variedad diferente o por carne.

Quinoa mediterránea

Ingredientes

• Filete de bacalao.
• ¼ de taza de aceitunas negras.
• ¼ de cebolla morada.
• 1/3 de queso feta.
• 1/3 de taza de garbanzos.
• ½ taza de quinoa.
• ½ de pimiento amarillo.
• ½ de pepino.
• ½ lima.
• 1 taza de agua.
• 4 hojas de menta.
• 6-8 tomates cherri.
• Perejil.
• Sal.

Elaboración:

Pon a cocer la quinoa en agua con un poco de sal y deja que se haga durante unos 15 minutos. Trocea el pimiento, la cebolla morada, los tomates, la menta, el perejil y el pepino. Introduce los ingredientes picados dentro de un cuenco, añade las aceitunas, los garbanzos y el queso feta, mezcla todo y agrega el zumo de media lima. A continuación, sazona el pescado con sal y pimienta por ambos lados, añade un chorrito de aceite en una sartén y deja que se haga unos 6 minutos por cada lado con la sartén tapada. Mientras tanto, agrega la quinoa al bol, mezcla, dale la vuelta al pescado y emplata.

Otra forma de comer la quinoa es incorporarla a tus desayunos o meriendas. Hazte un batido, unas tortitas, prepara un bol de leche y mezcla este cereal con frutas cortadas y frutos secos o cambia la leche por un yogur, añádela a tus barritas de cereales o hazte unas galletas, tal y como aconsejan en el vídeo de Cocina & Vida Saludable.

Galletas de quinoa y plátano

Ingredientes

• 2 plátanos macho.
• 1/2 taza de quinoa.
• 1 cucharadita de sal.
• 1 cucharadita de aceite vegetal.
• 1 cucharadita de vainilla.
• 1 cucharadita de sal.

Elaboración:
Después de lavar y escurrir bien la quinoa, tendrás que dejarla en remojo mientras tanto aprovecha para preparar el resto de los ingredientes. Pon a calentar el agua en una cacerola, cuando hierva, espolvorea una pizca de sal y cuece los plátanos sin retirarles la monda. Déjalos cociendo durante 15 minutos. Cuando pase el tiempo necesario, retíralos del fuego. Después, escurre el agua de la quinoa y tuesta las semillas en una sartén, remuévelas de vez en cuando y cuando estén doradas, resérvalas. Quítale la pela a los plátanos, aplástalos con un tenedor, agrega la vainilla, el aceite y mezcla. Una vez que la quinoa esté fría, tritúrala y añádela junto con el resto de ingredientes mencionados anteriormente. Intégralos bien y forma las galletas con las manos. Finalmente, cocina las galletas en una sartén entre dos y tres minutos por cada lado.

FOTO PRINCIPAL: Foto de Shashi Chaturvedula en Unsplash.