5 complicaciones asociadas a los piercings

Carmen Reija. Farmacéutica

La perforación de las orejas, la nariz o la boca para poner algún adorno es un procedimiento que se usa desde la antigüedad y se mantiene en la actualidad. Originalmente se trataba de una práctica de iniciación a la vida sexual o adulta en función de las creencias de diferentes tribus. En la actualidad se asocia a la estética personal, pues ponerse un piercing es una ilusión que parece sencilla de cumplir. Pero no todo es positivo. En un 20% de los casos se producen complicaciones, especialmente los que se ubican en la boca y los genitales. Conocer los riesgos te ayudará a tomar una decisión.

27/04/2024

Los datos que manejan los especialistas señalan que, en el 20% de los casos, se producen complicaciones como infecciones y sangrados locales. También se han presentado dermatitis de contacto, hemorragias, formación de queloides por mala cicatrización y daños en los nervios. Las causas de aparición de estos problemas se asocian a ...

Los datos que manejan los especialistas señalan que, en el 20% de los casos, se producen complicaciones como infecciones y sangrados locales. También se han presentado dermatitis de contacto, hemorragias, formación de queloides por mala cicatrización y daños en los nervios.

Las causas de aparición de estos problemas se asocian a factores como el material empleado, la higiene del procedimiento, la experiencia del profesional, la zona del cuerpo en la que se realiza el piercing y los cuidados posteriores.

Los especialistas señalan que, de manera general, las complicaciones asociadas a los piercings serían diferentes en función de la zona del cuerpo en la que se ha realizado. En este sentido, destacaría que:

1-Boca

Cuando se realiza la inserción de un piercing en la boca se podrían generar varias lesiones bucodentales. Las más frecuentes se centrarían en: dificultades para hablar y masticar, alteración del gusto, dolor, inflamación, sangrado, aumento de la salivación, infecciones y reacciones alérgicas al material empleado para su elaboración. Los piercing insertados en la lengua, especialmente, presentan un alto riesgo de hemorragia, ya que en la lengua existe un elevado número de vasos sanguíneos que pueden ser afectados por la incisión.

Con el paso del tiempo, los piercings insertados en los labios y la lengua podrían provocar otro tipo de alteraciones (como halitosis, úlceras, retracción de la encía, depapilación, fisuras, abrasiones, pigmentaciones, daño en el hueso o pérdida de piezas dentales) por lo que se recomienda su control habitual.

2-Genitales

Los piercings colocados en los genitales podrían provocar heridas en las mucosas, la obstrucción de la uretra y algunas infecciones que generarían problemas de salud.

3-Ombligo

El ombligo es una zona en la que se pueden producir infecciones con facilidad, debido a la presencia de humedad y a la escasa aireación. Este ambiente favorece el crecimiento de hongos y bacterias causantes de diversas infecciones que precisan tratamiento médico. Además, el tiempo medio de curación tras la realización del piercing puede ser superior a un año.

4-Oreja y nariz

La nariz y las orejas presentan un cartílago que podría sufrir desgarros y necrosis cuando se ve perforado. Estas alteraciones podrían provocar deformidades que pueden requerir una cirugía específica para su tratamiento y eliminación.

5- Pezones

Los piercings realizados en el pezón podrían provocar una inflamación de los conductos galactóforos ocasionando una galactorrea o salida de leche espontánea. Además, podría aparecer una cicatriz residual que podría afectar la lactancia materna.

Para que la relación de pareja mejore con los años
Qué es el skin dieting del que todo el mundo habla
¿Cómo funciona el cerebro cuando nos `enamoramos´?

Cookie Consent

This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy