La motivación puede definirse como el proceso que inicia, dirige y mantiene las conductas que se orientan a lograr un objetivo o a satisfacer una necesidad personal. Podría entenderse como la energía que nos anima a actuar y nos permite seguir adelante en cualquier situación a la que tengamos que ...
La motivación puede definirse como el proceso que inicia, dirige y mantiene las conductas que se orientan a lograr un objetivo o a satisfacer una necesidad personal. Podría entenderse como la energía que nos anima a actuar y nos permite seguir adelante en cualquier situación a la que tengamos que enfrentarnos.
Es un principio básico en psicología. Se considera que dirige las conductas realizadas por los seres humanos. Está asociada a otros constructos psicológicos y al bienestar y la salud general. Es un concepto imprescindible para poder realizar esas conductas e interpretar correctamente todo lo que nos rodea.
Es preciso que cada uno encuentre sus estrategias personales para automotivarse. Esta personalización es fácil de entender si te fijas en ello. ¿Cómo te motivas tú? ¿Te gusta más la lluvia o el sol? ¿Prefieres el otoño o la primavera?
De manera general, los expertos señalan que algunas recomendaciones pueden ayudarte a aprender a gestionar tus emociones y automotivarte. Entre las más eficaces destacarían:
1-No te centres en lo negativo
Nuestros pensamientos influyen en la manera en la que realizamos el afrontamiento de cada situación. Si utilizas un afrontamiento negativo, será muy difícil que puedas lograr tus objetivos. ¿Tienes demasiados pensamientos negativos? Ha llegado el momento de eliminarlos e ir cambiándolos por nuevos pensamientos y creencias que te ayuden a alcanzarlos.
2-Felicítate por tus progresos
Lograr la motivación necesaria para lograr tu objetivo es tomar conciencia de los progresos que vas haciendo a corto plazo. Cuando percibes que tu esfuerzo merece la pena es más probable que perseveres en conseguirlo. Divídelo en submetas que puedas ir cumpliendo y concédete un premio por cada fase superada para poder reconocer tu progreso.
3-Acepta tus errores y utilízalos para mejorar
Reconocer lo positivo (tus avances y tus buenas sensaciones) y lo negativo (los errores que has cometido y las ideas para mejorarlos) te ayudará a alcanzar tu objetivo. Relativizar los fallos facilita el aprendizaje y la consecución del objetivo planteado.
4-Acepta que existen malos momentos
Lo normal es que existan buenos y malos momentos (en los que percibirás que tus pensamientos son derrotistas y sentirás el deseo de abandonar tu objetivo). Cuando te sientas así, busca un motivo importante para perseverar y seguir adelante.
5-Busca un buen apoyo
Puede resultar decisivo encontrar a alguien que tenga un objetivo similar al tuyo y podáis apoyaros mutuamente para alcanzarlo. Localizar información de diferentes fuentes que consideres adecuadas también facilita la motivación personal.
Son recomendaciones generales y es necesario seleccionar la que mejor se adapte a tus necesidades y gustos personales. Si observas que no consigues tu objetivo, acude a un psicólogo porque puede aportar técnicas y herramientas psicológicas que sólo pueden aplicar los profesionales.