En multitud de ocasiones hemos oído hablar de los diferentes procesos a los que puede someterse el café, sin tan siquiera entender en qué consistía en este contexto el término `proceso´. Pues bien, procesar el café se traduce como el camino que va desde que se recolectan las cerezas de ...
En multitud de ocasiones hemos oído hablar de los diferentes procesos a los que puede someterse el café, sin tan siquiera entender en qué consistía en este contexto el término `proceso´. Pues bien, procesar el café se traduce como el camino que va desde que se recolectan las cerezas de café, se separa la pulpa del grano interior para poder secarlo y a partir de aquí, conseguir el porcentaje ideal para preparar el café para su exportación.
Todo el universo que envuelve el procesado del café es muy complejo. Hay multitud de factores y minuciosos detalles que intervienen en el éxito de un determinado procesado del café. Algunos de estos son los métodos de despulpado y la maquinaria empleada, los porcentajes de humedad y el ph o los tiempos de reposo y secado. Estos factores, junto con las propiedades del café en sí -como son la variedad, altitud en la que se ha recolectado, climatología o la composición del suelo de cultivo- otorgará un determinado perfil en taza.
El tratamiento del café mediante uno u otro proceso tiene un gran peso en su perfil en taza, desde el sabor hasta el aroma, pasando por su textura. Así, entre las principales metodologías para procesar el café, podemos diferenciar cinco grandes procesos:
● Natural: En este proceso, tras la recolección se trasladan las cerezas a la planta de procesado, se extienden en patios de cemento o camas elevadas y las dejamos secar al sol durante entre 15 y 30 días, en los cuales el café se va rotando para promover un secado uniforme. Una vez secas es cuando se procede a retirar las capas. "Este proceso es muy común en cafetales de Brasil que son cafés cultivados a baja altitud y que da lugar a un café con más cuerpo, dulzor y complejidad" indica Rodrigo Moreiras, Head of Coffee de Syra Coffee.
● Honey: En este proceso, conocido también como `pulped natural´, se retira a los granos la cáscara o "piel" y se dejará secando al sol sin llegar a retirar el mucílago. Generalmente se utilizan camas africanas y el proceso finaliza en la trilla. "Este café en taza se caracteriza por la búsqueda del dulzor y complejidad, pero sin prescindir de la sutileza que aporta un proceso lavado" especifica Moreiras.