La irritación de garganta es un problema habitual en todos los grupos de población. Se presenta en cualquier momento del año, aunque suele ser más frecuente cuando se producen los cambios de estación o nos vemos sometidos a variaciones bruscas de temperatura. Cuando tienes la garganta inflamada percibes una irritación que ...
La irritación de garganta es un problema habitual en todos los grupos de población. Se presenta en cualquier momento del año, aunque suele ser más frecuente cuando se producen los cambios de estación o nos vemos sometidos a variaciones bruscas de temperatura.
Cuando tienes la garganta inflamada percibes una irritación que genera una serie de síntomas muy molestos entre los que destacarían tos, picor, aspereza, carraspera, dificultades para tragar o respirar, ardor, dolor y malestar general. Si los síntomas persisten durante mucho tiempo y tienes fiebre, es posible que estén causados por una infección bacteriana. Es preciso que el médico realice el diagnóstico y paute el tratamiento adecuado.
Los expertos señalan que la prevención es la mejor opción para evitar su padecimiento. Entre las causas más habituales de irritación de garganta destacarían:
1-Actividades inadecuadas como hablar, gritar o cantar durante un tiempo prolongado que causa, entre otras alteraciones, tensión muscular.
2-Alergias provocadas por los ácaros, las mascotas o el polen.
3-Contaminantes ambientales como el humo del tabaco, la polución o los productos químicos.
4-Factores externos. En este epígrafe se incluyen situaciones como el cambio brusco de temperatura (al pasar del calor exterior al aire acondicionado, por ejemplo) y la exposición prolongada al frío o a ambientes con polvo.
5-Infecciones bacterianas causadas por diferentes bacterias.
6-Infecciones virales causadas por virus. Suelen ser procesos autolimitados que, por lo general, se resuelven por sí solos y provocan dolor de garganta y congestión nasal.
7-Respirar durante un tiempo excesivo por la boca, en lugar de hacerlo por la nariz y, por tanto, provocar la sequedad de la garganta.
Algunos remedios caseros pueden reducir la irritación de garganta. Los que se recomiendan de manera habitual serían:
-Beber infusiones adecuadas para mejorar el resfriado y reducir la irritación de garganta. El té rojo, el té verde o el tomillo, por ejemplo, te ayudarán a hidratar la garganta y presentan capacidad antioxidante, antibacteriana y antiinflamatoria.
-Mantener una hidratación correcta empleando humificadores, duchas de vapor o poner agua a hervir en una cacerola, agregar eucalipto o mentol y respirar el vapor poniendo una toalla sobre la cabeza y repitiendo varias veces, en función de tus necesidades.
-Hacer gárgaras con agua salada y tibia porque contribuyen a calmar la irritación e garganta, expulsar la mucosidad y aliviar las molestias. Se recomienda hacer gárgaras durante varios segundos y escupir, repitiendo el proceso varias veces al día.
-La miel se considera suavizante para la garganta por lo que, tomar una cucharada de miel o infusiones endulzadas con ella, contribuye a calmar la irritación.
-Pastillas y caramelos (normalmente de miel, de menta y limón) que puedes adquirir libremente en centros especializados y te ayudan a mejorar la sensación de garganta irritada.