Arranca la época de esquí y hay ciertos momentos en los que los amantes del deporte blanco consiguen cumplir su deseo y deslizarse por las colinas de estaciones como Baqueira Beret o Formigal. Quizás no se sea tan forofo, pero si se tiene algún día pensado una escapada a algún pueblo ...
Arranca la época de esquí y hay ciertos momentos en los que los amantes del deporte blanco consiguen cumplir su deseo y deslizarse por las colinas de estaciones como Baqueira Beret o Formigal. Quizás no se sea tan forofo, pero si se tiene algún día pensado una escapada a algún pueblo blanco de alguna sierra, como en Granada o los Pirineos. Sea un caso o el otro, te hace falta tener especial cuidado ese día con la piel.
La piel tiembla de miedo cuando se expone ante la bajada de temperaturas que supone la nieve. "Esta bajada supone un desequilibrio en la barrera hidrolipídica de la piel, que se ve comprometida y altera los niveles de hidratación de la piel, produciendo síntomas por todos conocidos como la tirantez facial o la sensación de labios pelados", explica Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD. Esto da lugar a síntomas bastante comunes, como "la rojez en zonas como las mejillas, los labios o la nariz pelados y la sensación de tirantez", sostiene Estefanía Nieto, directora técnica de Medik8.
Una serie de productos esenciales que aseguran una hidratación completa y continuada, así como una correcta protección solar.
El nombre de producto reparador puede llevar al concepto erróneo de que solo sirven para arreglar un mal ya producido. Ahora bien, todo lo contrario: son los aliados perfectos para prevenir la sensibilidad o rojez de la piel, la resequedad, etc. Como comenta Mireia Fernández, directora técnica de Omorovicza: "desde los complejos termales reparadores a las ceramidas, responsables de perfeccionar la función barrera del tejido para retener la humedad en él, pasando por los omegas", todos ellos son ingredientes a tener en cuenta en la lista de esencial a la hora de comprar los productos que han de acompañarnos en jornadas de esquí. Uno de los aspectos más demandados son los bálsamos que eviten esa sensación de tirantez, de labio con la piel pelada o incluso con heridas.
Estos ingredientes han de estar presentes en los productos hidratantes que se utilicen. "Por ejemplo, es importante entregar ácidos grasos como los omegas o el escualano que aportarán esa sensación de confort y de nutrición exhaustiva. También serán beneficiosos los complejos de ceramidas o los extractos de setas, que suelen reforzar la barrera de la piel", explica la experta de Perricone MD. Del mismo modo, serán esenciales las fórmulas con un buen filtro solar. La nieve tiene la virtud o el defecto de reflejar los rayos del sol, por lo que la incidencia sobre la piel se incrementa, de ahí que sea común quemarse cuando alguien practica este tipo de deportes.
La diferencia entre un suero y una crema está en que el primero suele llevar más carga de principio, mientras que la segunda asegura una hidratación completa. "Puesto que el suero lleva más cantidad de ciertos ingredientes de tratamiento, suele estar focalizado en resolver preocupaciones concretas. En este caso, las dos principales preocupaciones posibles son el aporte de antioxidantes e ingredientes que puedan calmar la piel para evitar que se altere con el frío", comenta Marta Agustí, directora técnica de Boutijour.
Snow Lotus Lifting Serum de Boutijour es una bomba de antioxidantes a partir de loto de nieve, extracto de camelia o semillas de cebada y cuenta con niacinamida para calmar y ofrecer efecto escudo en la piel. Otra opción es finalizar con un suero en aceite que ayuda a potenciar la función barrera de la piel, como C-Tetra Luxe de Medik8, con vitamina C, extracto de moringa, escualano o ginseng rojo.