Entre las posibilidades para elaborar platos nutritivos, saludables y sabrosos te proponemos: 1-Arroz. Una vez cocido, puedes conservarlo dos o tres días en la nevera bien tapado. Puedes preparar un salteado con verduras en juliana y atún, por ejemplo. 2-Copos de avena. No sirven solo para mezclarlos con leche en el desayuno ...
Entre las posibilidades para elaborar platos nutritivos, saludables y sabrosos te proponemos:
1-Arroz. Una vez cocido, puedes conservarlo dos o tres días en la nevera bien tapado. Puedes preparar un salteado con verduras en juliana y atún, por ejemplo.
2-Copos de avena. No sirven solo para mezclarlos con leche en el desayuno ya que puedes preparar con ellos sopas de elaboración rápida. Corta verduras en juliana (cebolla, puerro, zanahoria y acelga, por ejemplo) y sofríelas en aceite de oliva. Añade agua con sal hasta cubrirlas y deja que hiervan. A continuación, añade los copos de avena. Puedes sazonar antes de servir con salsa de soja, por ejemplo.
3-Fideos de arroz. Hierve agua y añade los fideos de arroz. Tapa la olla y apaga el fuego. Escúrrelos a los 5 minutos y saltéalos con tus verduras preferidas. Si te gusta, puedes añadir un huevo y remover todos los ingredientes. Aliña con tu salsa preferida.
4-Huevos. Aprovecha cualquier resto que hayas guardado correctamente en la nevera (verdura o pollo, por ejemplo). Puedes prepararlos revueltos o en tortilla y añadir queso o tus especias preferidas. Combinan muy bien con atún y espinacas hervidas o salteadas, entre otros alimentos.
5-Legumbres. Si te da pereza o crees que es latoso emplear las legumbres secas, utiliza las conservas naturales o envasadas al vacío que encontrarás en diferentes puntos de venta. Es posible congelar las legumbres cocinadas en raciones individuales o utilizar las que te hayan sobrado para elaborar puré, paté o sopa.
6-Pasta. La pasta fresca se cuece muy rápido pero implica la necesidad de tener en cuenta la fecha de caducidad para evitar que se pierda. La pasta seca admite un mayor plazo de conservación y te permite improvisar una comida o una cena rápida. Combina con todo, por lo que puedes elegir los ingredientes que más te gusten (tomate, aceite de oliva, pesto, ajo, frutos secos, pavo, verduras, salsa de soja, perejil o parmesano rallado, por ejemplo). Solo tienes que hervirla en agua con sal según el tiempo indicado en la etiqueta por el fabricante.
7-Pan. Elegir un buen pan de cereales y conservarlo correctamente te permitirá disfrutar de él al menos dos días. Si prefieres que sea crujiente o se te ha puesto un poco duro, puedes calentarlo en la tostadora y añadir un poco de aceite de oliva y tomate para mejorar su textura. Es posible congelarlo en raciones individuales y sacarlo el día que vayas a consumirlo. También puedes rallarlo para preparar pan rallado casero que puedes utilizar para empanar pescado o carne, por ejemplo.
8-Verduras. Puedes cocinarlas de forma rápida si las cortas en tiras finas (para hacer un salteado) o en rodajas o láminas (para prepararlas a la plancha).