Mitos sobre la medicina estética que debes desterrar

María Robert 

Según la doctora María Ángeles Raya León, Directora médica clínica y Expert de IBSA Derma Iberia, estas falsas creencias infundan los principales miedos de los pacientes a la hora de someterse a un tratamiento

21/12/2023

Desde hace unos años, está cambiando el público que recurre a la medicina estética y con ello, el perfil de paciente que reclama este tipo de tratamientos. De hecho, según un informe de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) hace una década la edad media de iniciación en este ...

Desde hace unos años, está cambiando el público que recurre a la medicina estética y con ello, el perfil de paciente que reclama este tipo de tratamientos. De hecho, según un informe de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) hace una década la edad media de iniciación en este tipo de tratamientos era a los 35 años, y en 2022 bajó hasta los 20.

Cada vez son más los jóvenes los que apuestan, por ejemplo, por tratamientos con ácido hialurónico para mejorar su aspecto facial y corporal. Debido al gran aumento en la demanda de este tratamiento y la variedad de centros que los ofrecen, los expertos advierten de la necesidad de tener toda la información antes de acudir a un profesional para no obtener resultados no deseados.

La doctora María Ángeles Raya León, Directora médica clínica y Expert de IBSA Derma Iberia, explica que los principales miedos de los pacientes a la hora de someterse a un procedimiento de medicina estética provienen de unos mitos establecidos como una creencia general o colectiva. "Los más extendidos son la posibilidad de quedar deformado, hinchado y con pérdida de expresión".

Por otra parte, añade, "están las creencias erróneas de que la toxina botulínica (bótox) se aplica en los labios, que la medicina estética está destinada a personas maduras de cierta edad o que una vez que desaparezca el producto van a quedar peor".

"Las creencias que más veo en mi consulta son sin duda que la toxina hincha la cara, que rellena los labios y que con un vial de ácido hialurónico pueda quedar con aspecto overfilled (exceso de relleno) o todo lo contrario, que con un solo vial podemos hacer un tratamiento fullface o de cara completa".

Sin embargo, la realidad está bastante alejada de ello y por eso la doctora aclara algunos puntos. "La toxina botulínica no es un relleno, es un miomodulador, nos ayuda a relajar esos músculos que son responsables de marcar en nuestra piel las arrugas de expresión del tercio superior de la cara cuando gesticulamos, por este motivo no va a hinchar ni a rellenar ni lo pondremos en labios, ya que no es deseable perder movilidad en esta zona por su función".

Falsas creencias sobre el ácido hialurónico

Otro de los aspectos trata de la cantidad de ácido hialurónico a infiltrar. Según la experta, los viales generalmente son de 1 ml, esta cantidad es algo inferior a la medida de una cucharita de café y 10 jeringas equivalen a un sobre de kétchup. "Sabiendo esto, ya podemos deducir que un tratamiento con un vial no nos va a rellenar en exceso, y en función de la zona o zonas que vayamos a tratar será suficiente con uno o necesitaremos varios".

Por otra parte, "cuando el resultado del tratamiento pase no va a quedar la piel peor, al contrario, le hemos aportado hidratación, soporte o hemos relajado los músculos, de forma que durante ese tiempo la piel ha estado tratada, cuidada y no ha repetido los movimientos que ocasionan las arrugas retrasando los signos de envejecimiento".

Empezar lo antes posible a combatir los signos del envejecimiento

Para finalizar, Raya León agrega que los tratamientos de medicina estética en la actualidad están enfocados a la prevención de los signos de envejecimiento, "por lo que no debemos esperar a que éstos sean avanzados para empezar a cuidarnos, de esta forma los resultados siempre serán más progresivos y naturales".

Lo primero, recalca, "es encontrar a un profesional médico cualificado que realice un análisis correcto y que facilite la información sobre los distintos tratamientos de forma que disipe nuestros temores". "Es muy importante valorar no sólo al paciente en su conjunto, sino también la piel, conocer su historia, qué necesita y por supuesto escuchar al paciente, qué es lo que busca conseguir para poder consensuar con él los tratamientos más apropiados que podamos ofrecerle ayudándole a conseguir un aspecto saludable y natural", subraya.

Por último, concluye expresando su confianza en que "con una cada vez mejor información a nuestros pacientes, estas creencias erróneas y mitos vayan cambiando y que la medicina estética pueda ser sinónimo de palabras como belleza, salud, naturalidad, seguridad, etc.".

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