Disfrutar de una mirada intensa y atractiva es un objetivo central de un elevado número de personas. Emplear una buena máscara puede ayudar a aumentar el protagonismo de tus pestañas, pero es posible que no consigas el efecto deseado. Algunas personas desean conseguir un efecto más duradero, por lo que ...
Disfrutar de una mirada intensa y atractiva es un objetivo central de un elevado número de personas. Emplear una buena máscara puede ayudar a aumentar el protagonismo de tus pestañas, pero es posible que no consigas el efecto deseado. Algunas personas desean conseguir un efecto más duradero, por lo que deciden realizar un tratamiento específico para las pestañas que les permite alcanzarlo.
Los centros estéticos especializados proporcionan opciones de tratamiento que permiten disfrutar de unas pestañas bonitas de forma rápida y duradera. Los precios se han reducido en los últimos años, aunque siguen resultando elevados para un porcentaje de la población. A pesar de todo, lo recomendable es acudir a ellos para reducir los riesgos.
Entre las opciones de tratamiento destacarían:
1-Pestañas postizas y extensiones, normalmente sintéticas. Se aplican con distinto número de pelos y diferente distribución (individuales, enteras, de esquina y mechones, fundamentalmente). Las pestañas postizas pueden ponerse y quitarse y las extensiones son semipermanentes, con una duración de dos o tres semanas. Ambas se fijan al párpado con un pegamento especial.
Este pegamento utilizado para adherir las pestañas puede provocar alteraciones a nivel ocular. Pueden presentarse dolor, picor, enrojecimiento, pesadez palpebral, dermatitis alérgica, queratoconjuntivitis, conjuntivitis, erosión conjuntival y blefaritis alérgica. Aunque el uso de pestañas postizas y extensiones es muy habitual, ambos tratamientos deben espaciarse en el tiempo o implementarlos únicamente en momentos especiales.
2-Pestañas magnéticas. Son más sencillas de colocar que las postizas y reutilizables (deben ser lavadas adecuadamente y no emplearlas tras la fecha de caducidad). Se fijan al párpado con unos microimanes o intercalándolas entre las pestañas naturales e imantándolas entre sí.
Pueden causar la caída de las pestañas naturales, su crecimiento hacia el interior de los párpados, irritación de la piel, orzuelos, reacciones alérgicas, lesiones oculares e infecciones en los párpados.
3-Permanente y tinte de pestañas. Aportan luminosidad y volumen a la mirada. Suelen aplicarse de manera conjunta para lograr un resultado mejor. La permanente potencia la curvatura natural de las pestañas y dura entre cuatro y seis semanas, el tiempo en el que se renueva de manera natural la pestaña. El tinte aporta fortaleza, cuerpo y volumen.
Ambos tratamientos pueden provocar reacciones alérgicas en la piel, caracterizadas por enrojecimiento e hinchazón. Se recomienda realizar una prueba previa 24 horas antes en otra parte del cuerpo.
4-Lifting de pestañas. Permite disfrutar de unas pestañas altas, lisas y estiradas. Se considera un tratamiento semipermanente y menos dañino que las extensiones, porque no utiliza pegamentos, el resultado es más natural y no requiere mantenimiento. Dura, aproximadamente, mes y medio.
Se utilizan productos químicos que pueden provocar reacciones alérgicas y solo debe realizarse tres veces al año para no alterar a las pestañas naturales.