Siempre hemos oído que la cena debe ser ligera, sobre todo desde el punto de vista nutricional. Pero lo que antes era una forma sencilla y fácil de prepararse algo para tomar antes de irnos a dormir, sin utensilios y evitándonos tener que cocinar, hoy en día, se ha convertido ...
Siempre hemos oído que la cena debe ser ligera, sobre todo desde el punto de vista nutricional. Pero lo que antes era una forma sencilla y fácil de prepararse algo para tomar antes de irnos a dormir, sin utensilios y evitándonos tener que cocinar, hoy en día, se ha convertido en el fenómeno social por excelencia. Es la llamada "cena de chicas" o, tal y como se ha popularizado en las redes sociales, marcarse una girl dinner. Se trata de un plan culinario que incluye alimentos de todo tipo: piezas de queso, aceitunas o pepinillos, algún tipo de embutido, zanahorias, un poco de humus, pan gourmet, frutos secos o nuestro capricho preferido. Y, por supuesto, que no falte una copa de vino o una cervecera bien fría. Todo ello con una presentación apetecible y colorida, ¡que luego hay que subir la foto a Instagram o hacer un vídeo en TikTok!
Una tradición solitaria que se ha convertido en un fenómeno viral en Internet, pero que no está exenta de controversia. Pues frente a las defensoras y detractoras, también existe la idea que esta tendencia se está reivindicando en contra de la tiranía del papel de la mujer en la cocina y las horas que invierte en preparar la comida para toda la familia.
En este sentido, distintos expertos en nutrición señalan las ventajas y desventajas de esta comida rápida y poco exigente. Entre los beneficios se apunta a que este tipo de tentempiés son ideales desde el punto de vista nutricional y la digestión, ya que las porciones son pequeñas, lo cual resulta ideal para ingerir en una comida horas antes de irnos a dormir y que no afecte al sueño. Asimismo, esta "cena de chicas" fomenta hábitos alimentarios más sanos, pues la persona se escucha a sí misma y sigue sus propios deseos alimenticios. De hecho, existen numerosos estudios que demuestran que hay una relación entre la alimentación intuitiva y la salud física y mental.
Por el contrario, los detractores consideran que este tipo de alimentación promueve tomar aperitivos bajos en calorías y en porciones pequeñas, lo cual puede resultar insustancial. Sobre todo, porque algunos de esos tentempiés incluyen panecillos de pizza, sopas, un huevo duro, fruta o un puñado de frutos secos. De tal manera que pueden derivar en dietas poco saludables, además de promover la normalización de una alimentación desordenada o escasa.
De una manera o de otra, lo importante es tener en cuenta nuestras propias necesidades alimenticias y nutricionales, y, sobre todo, saber que lo que puede ser beneficioso para una persona no puede serlo para nosotras, o viceversa.