Es probable que ya estés familiarizado con el trabajo de respiración para relajarte, descansar o dormir.; estos ejercicios son habituales en prácticas como la meditación o el yoga. Sin embargo, también hay una serie de ejercicios de respiración que tienen como objetivo hacerte sentir con más energía. Estos tipos de ...
Es probable que ya estés familiarizado con el trabajo de respiración para relajarte, descansar o dormir.; estos ejercicios son habituales en prácticas como la meditación o el yoga. Sin embargo, también hay una serie de ejercicios de respiración que tienen como objetivo hacerte sentir con más energía. Estos tipos de ejercicios de respiración incluyen el Método Wim Hof, la técnica 5-3-3 y la ´Respiración de fuego´, todos los cuales tienen diferentes aplicaciones y beneficios (más adelante entraremos en detalles).
La práctica de respiración energizante es mucho más saludable que usar cafeína o azúcar para animarse, así que, mejor probar a dejar de una vez esa taza de café y hablar sobre el increíble poder de la respiración para obtener energía de manera natural.
Las técnicas de respiración aprovechan el vínculo entre la respiración y el sistema nervioso autónomo. Este sistema corporal se divide en los sistemas simpático y parasimpático, que funcionan principalmente en oposición entre sí.
Mientras que el sistema simpático puede vincularse a nuestra reacción de lucha o huida, activándose cuando la mente detecta una amenaza, el sistema parasimpático es nuestro estado de ´descanso y digestión´, responsable de controlar las acciones involuntarias en nuestro cuerpo, como la digestión y la curación.
Como hemos mencionado, la práctica de la respiración aprovecha las reacciones de lucha o huida del sistema nervioso simpático. Al practicar deliberadamente estilos específicos como la respiración profunda o la respiración nasal alternativa, podemos influir en la forma en que funciona nuestro cuerpo. Esencialmente, lo que hará es engañar a su mente para que sienta un nivel controlado de estrés que le permitirá concentrarse y prepararse para una reacción rápida.
Las técnicas de respiración energizante producen resultados rápidos al jugar con el equilibrio de oxígeno y dióxido de carbono (CO2) en el cuerpo, por lo que siempre deben practicarse con precaución. Naturalmente, todos tenemos un nivel bastante alto de oxígeno en nuestros cuerpos, y en realidad es CO2 lo que nos falta.
Entre otros beneficios, el CO2 ayuda a dilatar nuestros vasos sanguíneos y aumenta la absorción de oxígeno en el cuerpo, por lo que es importante mantener un nivel adecuado de dióxido de carbono. Sin embargo, la respiración energética en realidad busca reducir aún más tus niveles de CO2. En resumen, exhalará más CO2 de lo que normalmente haría, lo que significa que fluirá menos sangre alrededor de su cuerpo y se desencadenarán las reacciones naturales de miedo y pánico de su cuerpo.
La exhalación de CO2 a un ritmo muy alto puede hacer que experimente algunos síntomas de hiperventilación, como hormigueo en los dedos de las manos y los pies, mareos leves y un aumento de la temperatura corporal. Si este es el caso, asegúrese de ser consciente de estas sensaciones y detenga su práctica volviendo a la respiración normal.
También es fundamental que practiques sentado, ya que existe un ligero riesgo de desmayo si practicas con bastante intensidad. Por eso es vital que investigues lo suficiente antes de probar estas técnicas y, cuando sea posible, practiques bajo la supervisión de otra persona, como un profesor de respiración.
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