Una vez elegido el regalo, que quizás en algunos casos es casi una misión imposible, ya sea porque el sorprendido tiene de todo y más o porque es difícil dar con un regalo adecuado que le vaya a hacer tilín. El segundo paso es seleccionar el papel que vamos a ...
Una vez elegido el regalo, que quizás en algunos casos es casi una misión imposible, ya sea porque el sorprendido tiene de todo y más o porque es difícil dar con un regalo adecuado que le vaya a hacer tilín. El segundo paso es seleccionar el papel que vamos a utilizar: con algún motivo, liso o el papel kraft, aquel un poco más grueso, principalmente es de color marrón, aunque es posible verlo en otros colores. Es reciclable y resistente. Otro tipo utilizado es el de seda, que es más delicado que el anterior, pero mucho más suave, o el reversible. Este es muy original porque puede tener diferentes tonalidades o estampados en una misma bobina, de modo que por una cara vale para envolver un regalo y si se le da la vuelta para cubrir otro diferente. Si los brillos son lo tuyo, prueba con el metalizado.
Existen cajas de cartón ya hechas con formas preestablecidas que además de para guardar el regalo dentro después se les puede dar un uso nuevo, el de almacenar cualquier tipo de recuerdo en su interior. Asimismo, en el mercado encontraremos bolsas lisas o con algún estampado, que nos puede servir para esto mismo. Sin embargo, como se trata de sorprender y sacarle una sonrisa al agasajado o agasajada en vez de comprar algo que ya esté preparado o decir en la tienda que envuelvan el producto que hemos adquirido, lo ideal sería que lo hicieses tú misma.
Si el detalle seleccionado es uno con una forma un tanto complicada, como es el caso una botella. Para que no tengas que meterla en una bolsa especial para botellas, prueba a seguir los pasos de la plataforma de decoración Westing España y conseguirás un regalo vistoso y con un toque elegante. Primero opta por un papel de color dorado, dóblalo a la mitad formando un triángulo, haz pliegues en una de sus esquinas, sitúa la botella en el centro y une la esquina plegada a la que no lo está. Termina haciendo un lazo en su parte inferior. En el vídeo de su perfil de Instagram vemos que lo decoran el obsequio con un lazo negro con motivos dorados. Por otra parte, los objetos que cuentan con una forma redondeada suelen resistirse y cuando procedemos a envolverlos el resultado final no acaba siendo el esperado. En Café con Gatos emplean dos tipos de papeles distintos. El primero se trata de uno tipo kraft que se emplea para la base, pero no llega a tapar ni el fondo ni la tapa de la caja. Con este recubre la cara externa y añade una capa extra de papel seda transparente y lo fija con una cinta de doble cara. Después, en la parte de arriba de la caja, realiza una serie de pliegues triangulares hacia el centro. Repite la misma operación con la base. A continuación, pega un trocito de Washi Tape o cinta decorativa en la parte de arriba y en la de abajo para fijar el papel, y a mayores coge un cordón, enrolla la caja con él y hace un par de nudos. Finalmente, incorpora un ramillete de flores seca en el centro.
Uno de los regalos más característicos de la Navidad suele ser un libro. Para evitar envolverlo de la forma tradicional sigue las recomendaciones de Hofmann España. Ellos colocan el libro en forma esquinada y dan forma a un sobre con un papel de color rojo anaranjado. Seguidamente, incorporan una cinta blanca para decorarlo con un lazo. Luego con un trozo de papel verde dibujan unas hojas de acebo, las recortan y las pegan en una esquina del envoltorio con unas pegatinas circulares rojas. Escriben un mensaje, lo guardan en un sobre y lo introducen por detrás de la cinta.
Para que no tengas que andar pendiente de comprar un rollo de papel cada vez que se termina el carrete, aprovecha para recuperar uno que tengas por casa o puedes sumarte a la moda del furoshiki, una técnica japonesa que en la que se emplea una tela para envolver los obsequios y para la que no se necesita nada más, ya que con sus extremos se forma el nudo. Cualquier cosa vale: un pañuelo, un paño, un mantel, etc. Así, una vez que entregues el presente, se le podrá dar un nuevo uso a su cobertura. En Body Nature muestran los pasos a seguir para recubrir un objeto pequeño. No tiene gran ciencia, sólo colocar el tejido sobre la superficie y el artículo que quieras regalar en una de sus esquinas. Recubrirlo con la tela y realizar un nudo con sus esquinas. En medio del mismo iría la tarjeta de felicitación y un ramillete de hojas secas. Si tienes pensando utilizar una caja de cartón no la compres, prueba a confeccionarla en casa con el método del origami, tal y como hacen el canal de Kimigami. Consiste en hacer varias dobleces por la parte estampada y por la que no tiene nada hasta conseguir dar forma a una pequeña cajita, que, una vez que el producto está dentro, cierran con un Washi Tape.
FOTO PRINCIPAL.: Foto de micheile dot com en Unsplash.