Un fin de semana en la ciudad de Oporto es uno de los planes más completos para los que comienzan sus vacaciones. A continuación, te damos algunas ideas  para disfrutar de esta ciudad de contrastes, sensaciones y colores.

Uno de los paisajes más fotografiados por los visitantes es la Ribeira, el barrio más auténtico de la ciudad. Seguro que te enamora pasear a la orilla del río Duero hasta llegar a su desembocadura, que fluye bajo el popular puente de Arrábida. Además de las toallas y paños, la cerámica portuguesa, que podrás encontrar en cada rincón de la ciudad, es una de las tradiciones más importantes y conocidas de Portugal. Buena muestra de ello es la coqueta Capilla de las Almas (o de Santa Catarina), una pequeña iglesia revestida de los típicos azulejos pintados de azul. Se encuentra en una de las calles más transitadas, la Rua de Santa Catarina, donde puedes ir de shopping y perderte en sus numerosas tiendas.

Muy cerca de esta iglesia encontrarás otro de los lugares con más éxito, el mercado de Bolhao, donde te espera una mezcla de colores, aromas y sabores. Y si eres de los que no puede irse de un lugar sin catar su gastronomía, esta ciudad te ofrece un sinfín de riquísimos pasteles y vinos que no puedes olvidar probar antes de volver a casa.

Ciudad de inspiración para J. K. Rowling

La Librería Lello, calificada como la más bonita de Europa, está situada en el centro histórico de la ciudad y  es parada obligada para el visitante. Esta famosa librería, conocida por haber servido de inspiración en algunas de las tramas de la conocida saga Harry Potter, es muy fácil de encontrar. De hecho, seguro que te topas con ella sin siquiera buscarla. La escritora J. K. Rowling se inspiró en las famosas escaleras de la librería para describir las escaleras de la escuela Hogwarts, y es que Rowling vivió en Oporto durante un par de años.

Sin duda, por sus dimensiones, Oporto es una ciudad ideal para recorrer a pie. Al atravesar la Avenida de los Aliados podrás empaparte de la historia de la ciudad, ver el Ayuntamiento y contemplar la Catedral de la Sé, la más importante de la ciudad. Además, paseando por sus callejuelas, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, verás cómo la ciudad cuenta con una mezcla de desorden colorido que te atrapa y te deja una sensación de decadencia perfecta.

Estamos seguros de que esta ciudad de grandes contrastes no te dejará indiferente y de que querrás volver a repetir la escapada en alguna otra ocasión.